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Calor, cosplays, regalos y frikis reunidos: ¿Qué demonios es la Comic-Con?

Con cómics a la Cómic Con

Calor, cosplays, regalos y frikis reunidos: ¿Qué demonios es la Comic-Con?
Randy Meeks

Randy Meeks

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Cada año en verano solo se habla de lo mismo en ciertos círculos: ¿Irá Marvel a presentar ‘Los Cuatro Fantásticos’? ¿Mostrará DC el primer tráiler de ‘Superman: Legacy’? ¿Qué sorpresas habrá? Y todo ello bajo un mismo halo. Dos palabras que se han convertido en meca y peregrinación para los fans de medio planeta: Comic-Con. Pero, ¿sabes lo que es, cómo ir y qué esperar al encontrarte? No te preocupes, que de algo me tenía que servir haber ido gastando todos los ahorros. Cero arrepentimiento.

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¿Dónde y cuándo es la Comic-Con?

Hay miles de Comic-Con por el mundo (en Madrid hay una, sin ir más lejos), pero solo hay una que se ha ganado con creces el apelativo: la de San Diego. Empezó en 1970 con apenas 500 asistentes y ahora reúne a 130.000 personas diariamente en el Centro de Convenciones de San Diego a finales de julio. La fecha exacta sale siempre a un año vista pero, para hacernos una idea, en 2023 empezará el día 20 y durará hasta el 23.

¿Son solo paneles?

Hay quien cree, porque es lo único que nos llega, que la Comic-Con son solo los paneles que las productoras y distribuidoras dan en el Hall H. Pero eso es realmente lo de menos, especialmente en un año como este en el que la mayoría, debido a la huelga de guionistas (y la de actores, probablemente) están pasando de asistir.

La Comic-Con está formada por cuatro sitios: el primero, las salas de conferencias, que son muchísimas repartidas por el piso superior y en las que se pueden dar unas veinte o treinta charlas al mismo tiempo, desde recuerdos de programas de nicho hasta las novedades en la línea de cómics de Spider-man (con la posibilidad de charlar después un rato con tu autor favorito).

El segundo, el hall, en el que están los puestos de toda índole, desde las productoras de cine hasta las tiendas locales de tebeos. Es el lugar donde llevarte tantas cosas gratis como puedas, encontrar cómics antiguos valorados en miles de dólares, conseguir firmas de famosos de segunda (previo pago) y hacer colas aunque no sepas ni para qué. Probablemente al final haya un autor famoso, un regalo o un concurso. Esto es lo que en España entendemos como salón del cómic, solo que en un formato inabarcable a todas luces.

El tercero, los off-sites, lugares a las afueras de la Comic-Con en los que las empresas promocionan sus series y películas montando todo tipo de experiencias, como escape rooms, huidas de zombies, realidad virtual o encuentros sorpresa con los actores. El año en el que yo estuve, por ejemplo, podías comer las hamburguesas de ‘Bob’s Burgers’ junto al cast de voces o entrar en ‘The good place’.

El cuarto, todo lo que pasa fuera: San Diego se transforma y hay tantas opciones de ocio como puedas imaginar, desde fiestas tematizadas gratuitas hasta monólogos, shows de Conan O’Brien, proyecciones de películas, Trivials… ¡Lo difícil durante la Comic-Con es que te entren ganas de dormir!

Me has convencido, ¿cómo compro la entrada para 2024?

No es fácil conseguir entradas para la Comic-Con. Piensa que entran 130.000 personas, pero unas 300.000 se quedan fuera. Solo hay un día y una hora para comprarlas y más vale que estés atento, porque después no hay más. Conseguirlas tú solo es cuestión de suerte: lo mejor es entrar en un grupo de compra de unas cincuenta personas (buscad: los hay online) para tener las mejores posibilidades. Y es que cada persona puede comprar entradas hasta para cuatro personas, pero entrar en el proceso no te asegura que las puedas conseguir.

Una vez tengas entradas para los días que quieras (el sábado es el más agobiante, el domingo es el día de las rebajas) es el momento de coger hotel entre los marcados por la organización a precios, digamos, abusivos… O coger uno a las afueras para ir en bus todos los días. El precio para ir de jueves a domingo te saldrá por 275 dólares, pero créeme: si te gustan este tipo de cosas, al menos tienes que ir una vez en tu vida. Y sí, ya sé que el avión es una barbaridad. ¡Es una vez en tu vida, ¿no lo has leído?!

Las he conseguido, dame consejos básicos

Muy importante: la comida que venden allí es carísima y de mala calidad (¿en Estados Unidos? Quién lo diría). Saliendo de la convención hay puestos de tacos riquísimos, supermercados y restaurantes para todos los bolsillos. Una hamburguesa cutre del McDonald’s te causará menos dolor gastrointestinal que cualquier cosa que puedas comer allí. ¡Ah! Y no te olvides de hidratarte. Es muy -muy- esencial y no queremos sustos.

Si vas solo, no pienses ni que eres el único, ni que te van a mirar raro: la gente ahí está para hacer amigos, charlar, encontrar personas como ellos e interesarse por las costumbres de tu país respecto a la cultura pop. Te hace falta saber inglés, claro, pero esto no debería ser una sorpresa a estas alturas. ¡Ah! No hagas colas que parezcan interminables y que no se mueven. Son interminables y, efectivamente, no se mueven (a mí me pasó con una que llevaba a un Taco Bell customizado como el de ‘Demolition man’).

Finalmente, no te agobies. Hazte un calendario. A dónde quieres asistir, qué es lo que quieres comprar (hay cientos de objetos exclusivos), dónde quieres ir. Es más: hazte dos calendarios, o hasta tres, por si las cosas van fallando. Si no puedes ir a la charla sobre los cincuenta años de ‘El increíble Hulk’ quizá puedas entrar en la retrospectiva de ‘La princesa prometida’ o en la presentación de novedades de Batman.

Y así, la próxima vez que alguien diga que en la Comic-Con solo hay presentaciones y, ahora que todos se han echado atrás, nadie irá, podrás mirarle y decirle “Ay, angelico”.

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Randy Meeks

Randy Meeks

Redactor especializado en cultura pop que te escribe en webs, revistas, libros, redes sociales, guiones, cuadernos y servilletas si no hay más sitios donde dar la chapa

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