¿Te imaginas irte a tu estación de tren más cercana y coger el siguiente tren a la Luna? Pues eso no va a pasar, no nos volvamos locos, en lo que están trabajando es en un tren que funcione en la Luna para las siguientes fases de colonización lunar.
En preparación de una colonia humana permanente en la Luna, DARPA ha adjudicado un contrato a Northrop Grumman para desarrollar un concepto de ferrocarril lunar, como parte del Estudio de Capacidades de la Arquitectura Lunar (LunA-10), de 10 años de duración.
Hacer circular un tren por la Luna puede parecer una profunda tontería, pero hay una lógica muy firme detrás de ello. Incluso cuando los primeros astronautas aterrizaban en el Mar de la Tranquilidad en 1969, se comprendió que una presencia humana permanente en Marte requeriría una infraestructura para mantenerla. Eso incluye minas de hielo, centrales nucleares, fábricas y ferrocarriles.
Un tren en la luna no es una tontería, pero sí algo difícil
Aunque mucha gente piensa que la Luna es pequeña, en realidad es un lugar muy grande, con una superficie equivalente a la de África. En semejante extensión, incluso una presencia limitada requeriría algún tipo de sistema de transporte para conectar los distintos puestos avanzados y actividades.
Los ferrocarriles tienen mucho sentido. Aparte de su valor logístico, son una forma de resolver uno de los principales problemas de la Luna: el polvo. El polvo lunar es extremadamente abrasivo y corrosivo.
Debido a la falta total de agua, la electricidad estática del polvo hace que se adhiera a los trajes y equipos espaciales, dejándolos no solo mugrientos sino con una vida útil reducida. Viajar en tren reduciría en gran medida el contacto entre los seres humanos y el polvo al ir los primeros de un lugar a otro.
Otro aspecto a tener en cuenta son las vías. Los buggies lunares podrían utilizarse, y sin duda se utilizarán, pero destrozan la superficie lunar. En la Tierra, dejar huellas suele significar que desaparecerán por la lluvia y la erosión en poco tiempo. En la Luna, permanecen intactas durante miles de millones de años. Aunque solo sea por razones estéticas, sería bueno reducir los daños al mínimo.
El nuevo contrato cubre algunos de los aspectos básicos del desarrollo de un ferrocarril de este tipo. Northrop Grumman se encargará de determinar las interfaces y los recursos necesarios para construir una red ferroviaria lunar, hacer una lista crítica de los riesgos previsibles en materia de costes, tecnología y logística, desarrollar los prototipos hasta el diseño conceptual y la arquitectura, y averiguar cómo construir el ferrocarril con robots.
Esto parece el inicio de una serie al estilo For All Mankind, una serie que te recomendamos muy fuerte si te gusta el género espacial y distópico.
