Piratas informáticos estarían robando cuentas verificadas de Instagram y Twitter para revenderlas el mercado negro a otros ciberdelincuentes que, a su vez, las emplearían para realizar estafas relacionadas con los NFT.
Las estafas online están a la orden del día. De hecho, es algo de lo que hemos hablado en nuestra página en más de una ocasión. En este sentido, hemos encontrado diferentes tipos de ciberchantaje en las principales redes sociales, como por ejemplo los chatbots en Facebook Messenger que efectúan ataques pishing.
Del mismo modo, los piratas informáticos también emplean estrategias alternativas para efectuar otros tipos de fraude como en el que las extensiones maliciosas de Chrome secuestran al propio navegador, algo de lo que también mencionamos previamente.
Ahora, hemos conocido una nueva información que publicada por el medio estadounidense The Verge, que apunta a que se estarían sustrayendo cuentas verificadas de Instagram y Twitter para hacer estafas relacionadas con los tokens no fungibles.
En este sentido, el precio de venta aproximado de cada una de estas cuentas verificadas usurpadas, que normalmente se realiza utilizando el servicio de mensajería Telegram, sería de unos 200 dólares.
Esta cantidad de dinero significaría una pequeña inversión si tenemos en cuenta que cada estafa relacionada con la venta fraudulenta de NFTs podría llegar a reportarles cientos de miles de dólares en una sola acción.
En relación con lo anterior, cabe señalar que el phishing y los ataques de relleno de credenciales serían los dos fraudes habituales que utilizan los delincuentes para robar cuentas verificadas de Instagram y Twitter y poder efectuar de manera satisfactoria su estafa.
Por lo tanto, si posees una cuenta verificada de Instagram o Twitter, sería muy recomendable que siguieras algunos consejos de seguridad para evitar caer en este timo y evitar el robo de tus credenciales.
Actualizar el sistema operativo de tu ordenador, emplear contraseñas diferentes para cada una de tus cuentas online, no conectarte a redes WIFI inseguras o comprobar la dirección de correo electrónico antes de hacer clic sobre cualquier link desconocido, son algunas de las recomendaciones básicas que deberías seguir si no quieres convertirte en una nueva víctima.