Somos unos cuantos miles de personas con el verificado de Twitter. El check azul ese que sale al lado del nombre en el perfil solo se conseguía cuando alguien era relevante en el mundo del deporte, la música, el periodismo y la política. Si eras “alguien” en Twitter te verificaban la cuenta.
El problema es que esto no daba dinero para la compañía y Elon Musk se ha dejado 44.000 millones de dólares para hacerse con la red social. Su idea de bombero fue cobrarnos el verificado a todos, de lo contrario lo perderíamos.
Elon Musk no da una y en Twitter ya están con la broma
Desde su llega a la junta directiva, Elon Musk nos sorprende cada semana con una idea recaudatoria nueva. Estos cambios constantes, unido a decisiones muy polémicas (desbloquear cuentas suspendidas por incitación al odio, como la de Donald Trump) han conseguido que los anunciantes se marchen.
Y si los anunciantes se marchan… ¿quién paga las facturas? Nosotros, los usuarios de la red social. El CEO de la compañía ideó el Twitter Blue, una suscripción a Twitter que da acceso a todo tipo de herramientas… y a la verificación azul. En Meta también la han introducido.
Pero eso chocaba de lleno con los usuarios que ya teníamos la verificación en nuestra cuenta por ser personas relevantes (a ojos de Twitter, en mi casa no saben ni cómo me llamo). De ahí que Elon Musk decidiera que el 1 de abril se nos retiraba el check azul si no pasábamos por caja. El verificado solo iba a ser cosa de los clientes de pago.
Pero, como ves en el tuit de Maya Pixelskaya, ha pasado el 1 de abril y los verificados hemos descubierto que no hemos perdido el verificado. Si bien nos han puesto una leyenda en el simbolito que es para estudiarla.
“Esta cuenta está verificada bien porque esté suscrita a Twitter Blue o bien porque es una cuenta verificada antigua”. De esta forma Elon Musk nos deja en el limbo y termina con las distinciones: todos al mismo saco.
Otra idea que sale rana
Elon Musk dijo hace unas semanas que las compañías que quisieran seguir teniendo el verificado tendrían que pagar y la cantidad no iba a ser de 8 dólares al mes, sino más de miles de dólares. Si tienes un negocio en Twitter te toca pagar.
Esto ha hecho que el The New York Times haya comenzado una guerra abierta contra Elon Musk. Por ejemplo, se negó a pagar el servicio y Twitter le ha retirado el Blue Check. Una cuenta con 55 millones de personas ya no está verificada.
Es realmente doloroso ver en qué se ha convertido Twitter y hacia donde va tras la adquisición de una persona que solo gobierna en el hoy.
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