8 de mayo de 2023. Dean Smethurst, un ciudadano de Reino Unido, fue a comprobar, como siempre, si su billete de lotería, el que compraba todas las semanas en el Tesco, la cadena de supermercados inglesa, había sido premiado. Y cuál fue su sorpresa cuando supo que no solo había ganado, sino que además podía prepararse para recibir una cantidad de dinero inmensa. Obviamente tiró la casa por la ventana y compró un viaje a Barbados para toda su familia después de una noche sin poder dormir por la emoción. Spoiler: había ganado 7 míseros euros.
Si sueñas, loterías
La historia es un poco más compleja, claro, no es que Smethurst no tuviera motivos para pensar que lo había petado. Y es que, cuando el hombre fue a comprobar su boleto en el Tesco, la respuesta fue que había ganado, pero no le podían pagar allí mismo y, en su lugar, tendría que contactar con Camelot, la empresa responsable de dar los premios.
En la propia web de Camelot se encontró con que normalmente este tipo de instrucciones solo se dan si has ganado por lo menos 50.000 libras, así que nuestro héroe, que llevaba seis años jugando a la lotería sin éxito, llamó a todo el mundo para darle la buena nueva: por fin tenía dinero para todos los caprichos que le dieran la gana. Alegría, alborozo. Pero, como ya era tarde, en el otro lado del teléfono en Camelot no había nadie que le confirmase la cantidad exacta de dinero que había acumulado.
Decidió que la fortuna iría a dos cosas: primero, arreglar del todo su casa. Segundo, invitar a su familia a un viaje de lujo a las Barbados. Podría haber comprobado los números él mismo, pero decidió tomar decisiones impulsivas en su lugar. Al día siguiente le dijeron lo que había ganado: tres reintegros para volver a jugar por valor de… 6 libras.
Entonces, ¿se puede saber qué es lo que ocurrió? Bueno, pues resulta que había comprado dos tickets para dos sorteos diferentes, y uno de los dos estaba ocurriendo en ese momento, así que para evitar confusiones la máquina lanzó ese mensaje automatizado. En fin. Esperemos que Dean lo pase bien en Barbados. No le queda otra.
