Los despidos en el mundo de los videojuegos no cesan. La nueva compañía en sumarse a esta “moda” ha sido la mismísima Amazon, que ha despedido a más de 100 empleados de su división de videojuegos, según un memorándum interno al que tuvo acceso CNBC. Los despidos afectan a trabajadores del grupo Game Growth, del estudio de juegos de Amazon en San Diego y de Prime Gaming.
Estos nuevos despidos se enmarcan dentro de una reestructuración que está llevando a cabo el CEO de Amazon, Andy Jassy, para reducir los costes en la compañía. El mes pasado, Jassy anunció que Amazon despediría a otros 9.000 empleados, además de los 18.000 que ya había recortado anteriormente.
Amazon Games, la división de videojuegos de la compañía, se lanzó en 2013 con la ambición de crear juegos de gran presupuesto y calidad, aprovechando el talento de desarrolladores procedentes de empresas como Sony (PlayStation). Sin embargo, y a pesar de haber publicado varios títulos, la división ha tenido muchas dificultades desde entonces para producir un videojuego exitoso.
En 2020, Amazon lanzó su primer juego triple A, Crucible, un shooter multijugador gratuito que acabó cancelando a los pocos meses debido a la baja afluencia de usuarios. Un año después, Amazon lanzó en PC New World, un MMO de mundo abierto que estuvo en boca de todos al principio (aupado por una gran campaña de marketing de influencers), y trató de aprovechar el interés generado lanzando en febrero de 2022 otro MMO: Lost Ark, que solo había salido en Corea del Sur hasta ese momento.
A pesar de los despidos, el vicepresidente de Amazon Games, Christoph Hartmann, aseguró en el memorándum que la compañía seguirá invirtiendo en el desarrollo de nuevos títulos, y que sus equipos seguirán creciendo a medida que avancen sus proyectos.
Además, Hartmann confirmó que los empleados que quedan en el estudio de San Diego se centrarán en la preproducción de un proyecto aún no anunciado, y que el estudio de Montreal, que también trabaja en otro proyecto secreto, se expandirá. También se confirma que continuará el trabajo en New World, el único juego desarrollado internamente por Amazon que sigue en activo, y que aumentará el equipo de Irvine, California, que está detrás del juego.
