Indiana Jones y el Dial del Destino ya es una realidad. La quinta parte de la saga del arqueólogo más famoso del cine se ha estrenado ya en el Festival de Cannes, y el próximo 30 de junio llegará a los cines de todo el mundo. En esta nueva película, Indy se enfrentará a la que parece que será su última gran aventura, y los aplausos de seis minutos del público francés dejan claro que será un evento digno de admirar.
Sin embargo, el director James Mangold, que sustituye a Steven Spielberg tras las cámaras por primera vez, no ha querido centrarse solo en la etapa mayor de Indiana Jones. Y, teniendo en cuenta que Harrison Ford tiene ya ochenta años, no le ha quedado otra que utilizar una técnica que está muy de moda en el cine actual: el rejuvenecimiento por CGI.
Harrison Ford, un joven Indiana Jones a los 80 años
Como hemos podido ver en los primeros avances de la película, las escenas del periodo posterior de la película, que ocurre en los años sesenta, se mezclan con algunas anteriores de cuando Indiana Jones era joven. Y para lograrlo han utilizado técnicas de digitalización que, por lo que parece, sientan como un guante al personaje.
Pero ¿cómo se ha tomado Harrison Ford esta técnica? Hay muchos actores que están en contra de llevar a cabo este tipo de herramientas. Sin embargo, la opinión de Ford parece ser bien distinta. En la rueda de prensa del Festival de Cannes, preguntaron al equipo si veríamos nuevas películas de Indiana Jones protagonizadas por este joven Harrison Ford. “No”, respondió Kathleen Kennedy, presidenta de Lucasfilm. Pero el actor decidió explayarse más:
“La tecnología ha evolucionado hasta el punto en que, para mí, parece muy realista. […] Sé que esa es mi cara -no es la magia de Photoshop-. Así era como me veía hace 35 años, porque Lucasfilm tiene todos los fotogramas de película que hemos hecho juntos durante todos estos años”.
Ford continuó explicando más sobre esta técnica: “Es solo un truco a menos que esté respaldado por una historia, y sobresale como un pulgar dolorido si no es honesto, no es real… quiero decir, emocionalmente real. Pero creo que se ha usado con mucha habilidad”.
Sin embargo, no es una especie de estrella venida a menos que echa de menos sus buenos años, sino más bien al contrario. Lo ha querido dejar bien claro: “Me siento muy feliz envejecido, me encanta ser mayor. Era genial ser joven. Pero, joder, podría estar muerto“.
Mientras Tom Hanks hace lo propio con sus películas y tiene claro que será una práctica habitual en el Hollywood del futuro, Ford se suma a la idea y cree que, siempre que esté justificado, está bien empleado. Veremos cómo la digitalización lo cambia todo cara al futuro, pero desde luego pinta a que tenemos muchos cambios por venir.
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