Xbox es la definición de no rendirse en la guerra de consolas. ¿Que mi competencia tiene más juegos? Compro exclusivas a montones. ¿Que pese a todo el público la prefiere? Pregunto si es posible colar el Gamepass. Y, por qué no, intento dar el salto a los móviles. Y en esas está Phil Spencer, que ya ha anunciado que tardaremos mucho menos de lo que creemos en ver su tienda de aplicaciones mano a mano con Google Play y la App Store. Se vienen terremotos.
Lo app-uesto todo
La Xbox Mobile Platform (que puede cambiar de nombre, claro) se filtró en octubre, como parte de la documentación necesaria para comprar Activision Blizzard. Lo que no imaginábamos es que su lanzamiento sería inminente. Y tiene sentido: Activision Blizzard compró en 2015 King, la desarrolladora de ‘Candy Crush’, que si solo aparece en la tienda de aplicaciones de Microsoft ya tiene medio camino hecho. Como empezar una carrera cien metros por delante.
Obviamente, desde Xbox saben que no va a ser fácil resistir en este mercado, así que lo están apostando todo a una sola palabra: decisión. Permitir que los usuarios muevan ficha por su cuenta en su propio teléfono y decida si quiere quedarse con lo ya impuesto o apostar por nuevas vías para conseguir sus juegos y aplicaciones.
El plan de Microsoft a largo plazo es ser relevantes no solo en la pantalla del ordenador y de la televisión, sino también en la del móvil. Cuantas más opciones, más posibilidades hay de que sea un éxito, al fin y al cabo. Vamos, que según se dice, antes del fin de 2024 ya tendremos un nuevo compañero en una oficina que cada vez está más y más abarrotada.
Cabe destacar que para entrar como un dinosaurio en una tienda de porcelana tendrán que esperar en los dispositivos Apple, porque a día de hoy no se pueden instalar tiendas alternativas a la oficial (en Android sí, por supuesto). Pero tendrán que cambiar y permitirlo para entrar dentro de la Ley de Mercados Digitales. ¿Eso significa que los fans de Apple van a acabar bajándose la tienda de aplicaciones de Xbox? Francamente, pocas cosas más locas e imposibles se me ocurren.
