Call of Duty: Modern Warfare III ha sido un lanzamiento bastante sonado para Activision Blizzard, pero no por los motivos que le gustarían a la compañía. Si bien millones de usuarios lo están jugando actualmente, la reciente entrega del estudio Sledgehammer Games ha sido una completa y rotunda decepción tanto para la prensa especializada como para los propios jugadores.
Como ya os explicábamos anteriormente, poco después del lanzamiento de Modern Warfare III las redes sociales ardían, con críticas muy duras al videojuego. Para empezar, hubo jugadores que reportaron que sus PS5 les pedían el disco de Modern Warfare II, algo que molestó (y extrañó) mucho a los jugadores y que sumaba al hecho de que, en un principio, la propia lista de trofeos figuraba como un DLC de MWII.
Esto prácticamente confirmaría los sonados rumores de que Modern Warfare III se concibió en un inicio como un DLC de MWII, alargándose más tarde el desarrollo para crear un juego completo (algo que también le ocurrió al reciente Like a Dragon Gaiden, aunque con mejores resultados). Pero eso no es todo.
Tras vendernos que en la campaña de Modern Warfare III tendríamos mucha más libertad y un mundo abierto, tanto medios como usuarios coinciden en que esta no es emocionante en absoluto, que la trama no tiene interés, que dura tan solo unas tres horas y que, por si fuera poco, está plagada de bugs. Algo “entendible”, si tenemos en cuenta que Activision solo concedió al estudio 6 meses para desarrollar la campaña.
Si a todo lo anterior le sumamos un multijugador en el que apenas se ha innovado nada (una gran sorpresa, desde luego), el resultado ha sido bastante catastrófico: Modern Warfare III es el videojuego peor valorado de la historia de Call of Duty, con un 53 sobre 100 en la web Metacritic, “superando” a Call of Duty: Vanguard, que cuenta actualmente con un 73 sobre 100.
Con la reciente adquisición de Activision por parte de Microsoft, desconozco si estos resultados supondrán un punto de inflexión en el desarrollo de una saga que lleva estirando el chicle demasiados años. Y no, no creo que la presencia de un viejo amigo perruno en Modern Warfare III mejore la mala imagen que se ha ganado la compañía solo con esta entrega.
