Hubo un tiempo en el que pagar por una suscripción significaba no tener que ver anuncios entre series y películas. Tenía sentido, ya que estábamos pagando por disfrutar de un servicio, pagábamos por ver el contenido. Eso se ha terminado.
Amazon Prime Video, uno de los últimos servicios de streaming en evitar introducir anuncios en sus películas y series, planea empezar a emitirlos a principios del año que viene según Variety. Sí, la era del streaming como la conocimos ha terminado.
Amazon sigue los pasos de otras plataformas de streaming (Disney+, Netflix o MAX) que también ofrecen niveles con publicidad, una medida que sugiere que el mundo del streaming podría acabar siendo exactamente igual que la televisión tradicional.
Anuncios en Amazon Prime, pero pocos
La empresa afirma que planea emitir menos anuncios en Amazon Prime Video que las cadenas tradicionales. Cuatro minutos por hora parece ser un punto de referencia para la menor cantidad de tiempo de anuncios en una plataforma de streaming.
Los anuncios aparecerán por primera vez en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Canadá a principios de 2024, seguidos de Francia, Italia, España, México y Australia a finales de año.
Aquellos que quieran seguir viendo Amazon Prime Video sin anuncios podrán hacerlo por un precio adicional de 2,99 dólares al mes en Estados Unidos, además de la suscripción anual al servicio Prime de Amazon.
Pagar un extra o poner anuncios, la única forma de sostener el negocio
Amazon dijo que la decisión de emitir anuncios durante las selecciones de Prime Video le ayudaría a “seguir invirtiendo en contenidos atractivos y seguir aumentando esa inversión durante un largo periodo de tiempo.”
Además de pagar millones por los derechos de “Thursday Night Football” de la NFL, Amazon adquirió MGM Studios en mayo de 2021 por 8.500 millones de dólares. A lo largo de los años, ha lanzado series de gran presupuesto como El Señor de los Anillos: Los anillos del poder, Tom Clancy’s Jack Ryan o La rueda del tiempo.
La decisión de Amazon significa que pocos o ninguno de los grandes servicios de streaming rechazan de plano los anuncios. Solo Apple TV+ no emite anuncios en sus programas.
La mayoría de las plataformas han adoptado al menos alguna forma de publicidad, y las empresas que gestionan estas operaciones tendrán que medir bien el flujo de anuncios: de lo contrario, el streaming fracasará ante la televisión tradicional.
