Este año no está siendo el mejor para Warner. A pesar de que Barbie haya sido un gran éxito y le haya permitido respirar, no podemos olvidarnos de que la mayoría de sus títulos han sido un fracaso en 2023, y la gran culpa de todo la tiene la deriva que han cogido las películas de DC Comics. Y es que, mientras esperamos que James Gunn lo arregle todo, no podemos evitar darnos de bruces ante los fracasos que han sido Shazam! 2, Blue Beetle y The Flash.
Pero, por supuesto, eso no es todo. Todavía faltaba una película por sumar a la ecuación este año: Aquaman 2. Y todo parece indicar a que seguirá su mismo camino… o hasta peor. Pero, si la primera Aquaman fue un éxito, ¿qué ha ocurrido con esta segunda parte? Bueno, más allá del cansancio general de este universo, hay una polémica que también ha provocado esta situación… y su nombre es Amber Heard.
Un estudio lleno de problemas
En mitad de la controversia que retrató Netflix en Depp vs. Heard, es decir, la denuncia de Amber Heard hacia Johnny Depp que terminó con una victoria de este último, Warner tenía un problema con Amber Heard. Era la coprotagonista de Aquaman 2 junto a Jason Momoa, pero su reputación había bajado tanto que era una mala idea tenerla en el set… y encima se llevaba fatal con Momoa, quien incluso llegó a aparecer vestido de Depp en el set de rodaje para hacerla rabiar.
Todo esto propició una situación muy difícil que hizo que Warner no quisiera contar con ella para la secuela. Sin embargo, alguien se metió por medio: Elon Musk. Así es, el magnate dueño de Twitter es también exnovio de Heard, y al parecer mantuvieron durante un tiempo una buena relación que provocó que el director amenazara a Warner.
Así es, según ha publicado Variety a través de un chivatazo anónimo, Musk envió una carta a los abogados de Warner prometiendo que pondría a sus abogados a “ponerlo todo patas arriba” si el estudio no traía de vuelta a Amber para Aquaman 2. En ese momento, eso sí, Warner ya había sacado de sus filas a Depp de Animales Fantásticos, así que tuvo que tomar una posición… y se dejó llevar por las amenazas del magnate.