El cancelado juego 1666 iba a ser “el Assassin’s Creed de PS4 y Xbox One” no en el sentido literal sino en sentido conceptual. Su creador, Patrice Désilets, es también el “padre” de Ezio Auditore y compañía. Fue despedido de Ubisoft por circunstancias difusas en mayo de 2013, dejando el proyecto en el limbo.
“Iba a ser el nuevo Assassin’s Creed. El primer año iba a consistir en reclutar al equipo, estudiar la época histórica pero también crear una nueva propiedad intelectual”. Al igual que en los AC, el jugador iba a toparse con figuras históricas famosas.
1666, juego que iba a salir en algún momento para PS4 y Xbox One, ocurría en ese año y estaba inspirado en la pintura de Rembrandt llamada “Filosofo en Meditación”. Désilets no sabe cómo describir la jugabilidad: “Estaba intentando hacer algo diferente, romper barreras”.
La valoración de Softonic
Désilets ha sido despedido dos veces de Ubisoft, con poco margen de diferencia entre ambos despidos. No podemos evitar preguntarnos qué tipo de actitud debe tener al trabajar. Al fin y al cabo, ¿quién despide sin una buena razón al creador de una saga tan rentable como Assassin’s Creed?
Fuente: Eurogamer