Vamos a empezar por aclarar dos términos, porque si te desconectaste de ‘Pokémon’ hace algun tiempo todo esto te va a sonar a griego. El primero es Genesect, un pokémon paleozoico que nació en ‘Blanco/Negro’ en 2010 y que es el número 649. El segundo es “hundo”, que en ‘Pokémon Go’ es una criatura que tiene al máximo todas sus características. Digamos que solo hay un tipo de pokémon más codiciado en el juego: los “shundos”, que son hundos y además shiny, con una posibilidad muy, muy, tremendamente baja de aparecer. ¿Entendido? Pues ojo a la historia que os traemos.
¿Dónde está la Master Ball cuando la necesitas?
Un usuario de Reddit que se hace llamar darkliege666 se encontró de golpe con un Genesect hundo (¿véis por qué las explicaciones eran necesarias?). Coger un Genesect en sí ya es difícil, y eso que lleva en el juego desde 2020, donde empezó como incursión de cinco estrellas que obligaba a pillarle en grupo… Y así sigue siendo. Es complicado, pero es que encima Niantic no lo ha puesto fácil.
Así pues, el jugador se dispuso a atraparle lanzando Pokéballs con su patentado estilo perfecto. Pero Genesect salió. Una y otra vez: 22 tiradas “excelentes” seguidas, 48 tiradas en total, 24 baya frambu doradas (que multiplican la posibilidad de captura por 2,5)… Y la criatura acabó huyendo dejando al entrenador pokémon más triste y con una escasez alarmante de bayas y Pokéballs. Qué metáfora de la vida.
Los jugadores más expertos no han simpatizado con su colega entrenador: han insistido en que debería haber tirado una baya en cada tirada, y no haberla alternado con las Bayas Pinia. ¿Lo único bueno con lo que puede tranquilizarse? Los Genesect no sirven de mucho en el modo competitivo de ‘Pokémon Go’. Frustración, sí, pero con un pequeño alivio. Más o menos.
