Que ChatGPT forma parte ya de nuestro día a día es una realidad. La afamada inteligencia artificial está en boca de todos durante este 2023, algo que no ha pasado desapercibido, cómo no, en el ámbito universitario. ¿La última? Pues un reciente estudio realizado por la Universidad de Brown, donde se han hecho la siguiente pregunta: ¿qué ocurriría si a ChatGPT 3.5 se le asignara el rol de CEO en una empresa?
Los investigadores crearon una empresa ficticia de desarrollo de software virtual llamada CHAT DEV. A partir de aquí, se buscaba comprobar cuatro procesos clave en el desarrollo de software: el de diseño, el de codificación, el de pruebas y el de documentación. La idea era que la inteligencia artificial respondiera por sus propios medios… y el resultado fue bastante bueno.
El 86,66 % de los proyectos que la IA desarrolló se ejecutaron sin problemas. Por ejemplo, llegó a crear un juego de mesa denominado Gomoku. Este lo desarrolló en apenas siete minutos y su coste de producción apenas fue de euro. El título era una especie de “cinco en raya” con una complejidad moderada, pero lo más relevante es que la IA fue capaz de crear las directrices, reglas o interfaz del propio juego.
Como curiosidad, la inteligencia artificial tuvo un debate interno sobre cuál era el lenguaje de programación idóneo para empezar la empresa. Tras una serie de deliberaciones, la empresa (o sea, la IA) optó por Python debido a su “sencillez y legibilidad”.
Para finalizar, el estudio universitario apuntó que si bien los resultados fueron buenos y prometedores, también se vio que existían limitaciones. Como es obvio, lo principal son los errores que pudieran aparecer en el código, así como las decisiones empresariales tomadas, donde ya entra en juego el aspecto puramente ético. Se puede consultar el estudio al completo desde el siguiente enlace.
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