Toda generación tiene su propio shonen. Muchos nacieron con Dragon Ball bajo el brazo, los siguientes afortunados lo hicieron con Yu Yu Hakusho, los que vinieron después lo hicieron con Naruto, y tras ellos ya llegaría Black Clover. No hay época que no se haya visto marcada por un anime en particular, basada en las aventuras y las hostias como panes. Pero hubo un tiempo en que Naruto parecía que no sería ese shonen generacional. Que como mínimo, tendría que compartir el trono. Porque durante mucho tiempo, tuvo que competir mano a mano con la larga sombra de Bleach.
Su vuelta el año pasado con la adaptación de su último arco está causando sensación, haciendo que Bleach: Thousand-Year Blood War sea toda una sensación. Pero este regreso ha tardo más de una década en ocurrir. Y sin embargo, es como si el tiempo no hubiera pasado. Los fans siguen ahí para Bleach. ¿Por qué es esto? Eso es lo que vamos a explicarte. Las razones por las que Bleach es una serie extremadamente popular, independientemente del tiempo que pase.
Su autor
Si algo destaca de Bleach es su autor, Tite Kubo. Amante de los yokais, los kimonos y los shonen clásicos, su intención a la hora de hacer Bleach era hacer un manga influenciado por los clásicos, pero que se sintiera moderno. Pero no nos dejemos engañar. Hay dos cosas que caracterizan a Tite Kubo: la acción y la sencillez.
A Tite Kubo le interesan los combates, su dramatismo y sus consecuencias. Están llenos de cortes, de cambios de ángulos, de planos complejos y extraños. Algo que le da dinamismo y fuerza a sus composiciones. Si a eso sumamos que tiende a ignorar los fondos casi en su totalidad, llegando en ocasiones a no dibujarlos en absoluto, es fácil comprobar porqué es un dibujante tan interesante de leer. Es rápido. Es dinámico. Y se traslada muy bien y de forma muy interesante al anime. Especialmente porque su diseño de personajes, muy influenciado por GeGe No Kitaro y el body horror, con personajes muy esquinados, aberraciones monstruosas y mucha gente en kimono, hace que pararse en cualquier página, o cualquier secuencia, de su obra sea siempre un placer.
Su director
Algo que benefició inmensamente al anime original de Bleach, emitido entre 2004 y 2012 es que tuvo por director al que hoy es considerado una auténtica leyenda del anime. El inmenso Noriyuki Abe.
Además de Bleach, ha dirigido Yu Yu Hakusho: Ghost Files, Great Teacher Onizuka, Black Butler: Book of Circus y más recientemente, Ōoku: The Inner Chambers. Un curriculum del que pocos pueden alardear. En ese sentido, simple y llanamente es un experto en dirigir obras de alto perfil y rodearse de los mejores profesionales posibles. Algo que hizo en Bleach, como hizo antes en Yu Yu Hakusho: Ghost Files, con resultados similares. Ambas series excelentes, que consiguen captar porqué son tan especiales sus respectivos mangas.
Su mundo
En general, la mayoría de shonen no suelen tener un mundo demasiado rico o elaborado. O para ser exactos, lo es de un modo más basado en añadir capas de lore que en crear capas de significado al mismo. A excepción de One Piece y algunos otros pocos ejemplos, como por ejemplo el extremadamente popular Jujutsu Kaisen, el shonen ha preferido centrarse en sus personajes y la atmósfera que se crea alrededor de los mismos. Este no es el caso de Tite Kubo, que en Bleach crea un universo complejo y extremadamente rico, donde existen los espíritus, algunas personas son capaces de verlos, y existe todo un entramado milenario alrededor de los mismos.
Con mucha influencia del taoísmo, pero fijándose mucho en las ideas folklóricas de los muertos en otros lugares del mundo para su inspiración, presenta un mundo rico, extremadamente complejo y extraño, del cual aún se siguen desvelando cosas en el anime. E incluso en el manga. Porque el mundo de Bleach siempre tiene algo nuevo por descubrir, algo aterrador por desvelar. Lo cual hace fascinante esta serie.
Sus personajes
Como decíamos antes, la mayoría de shonen se basan en el carisma de sus personajes. Algo en lo que Bleach no es ninguna excepción. El diseño de personajes los hace muy interesantes y, de hecho, cuando Tite Kubo no sabía cómo continuar la historia, hacía que girara entorno a personajes ya existentes o nuevos. Cuando eran nuevos, en ocasiones, creándolos en masa. Usando términos en japonés, inglés, español o alemán según para cada facción a la que pertenecían, buscando darles así personalidad y forma a través de la propia terminología de sus nombres, sus personajes tienen el interés de llamar la atención desde su mismo nombre.
Eso y que muchas veces su aspecto exterior no coincide con su aspecto imterior. Algo que da para muchas tramas de descubrimiento, muchos cliffhangers donde un personaje parecía que iba a ser una cosa completamente diferente a la que es y muchos desarrollos inesperados. Precisamente todo lo que hace tan especial y recordada a Bleach. El hecho de que, incluso tantos años después, aún hay cosas por los que volver a ella.
Algunos de los enlaces añadidos en el artículo forman parte de campañas de afiliación y pueden representar beneficios para Softonic.
