Aunque Cyberpunk 2077 puede haberse arreglado a ojos de los fans, eso no significa que no siga teniendo numerosos problemas. Principalmente, la cultura de trabajo del propio estudio. CD Projekt es un estudio muy importante en Polonia, pero para llegar hasta donde está, sólo durante 2023, ha tomado decisiones que no han sido precisamente favorables para los trabajadores. Eso sin contar con que el crunch ha sido la norma durante todo el desarrollo de Cyberpunk 2077. Por lo cual, una parte de sus trabajadores, ha dicho basta.
Es por eso que un grupo de trabajadores de CD Projekt han formado un sindicato llamado PGWU. Siglas para Polish Gamedev Workers Union. Este nombre se debe a que tienen miembros de otras compañías de videojuegos en Polonia, no exclusivamente de CD Projekt, siendo un objetivo mejorar las condiciones de todos los trabajadores en la industria del videojuego de Polonia. De ahí que hayan decidido no centrarse exclusivamente en su empresa, sino en la totalidad del país.
Una de las principales razones para ello han sido que, s¢lo durante 2023, CD Projekt ha pasado por tres fases diferentes de despidos. En mayo se despidieron a una veintena de empleados de The Molasses Flood, aproximadamente la mitad de la plantilla del estudio de Cancouver, a la vez que se despedían a más de treinta empleados de CD Projekt Red asociados a Gwent, el juego de cartas basado en The Witcher, tras la decisión de no dar más soporte al juego. A todo esto cabe sumar una tercera ronda de despidos, en julio, se anuncio una reducción de la plantilla de un 9% de CD Projekt Red, que supuso el despido de alrededor de un centenar de trabajadores.
Aunque hay muchos más problemas dentro del estudio, el PGWU, en una entrevista para CD-ACTION, ha destacado que creen que es necesario sindicarse para conseguir mejores condiciones de trabajo. También que esperan que su ejemplo sirva para que otras personas y empresas de las industrias creativas destierren el mito de que el sindicalismo es sólo para las factorías y la industria pesada. Algo que, teniendo en cuenta que ya se han unido a la OZZ IP, una formación intersindical anarcosindicalista, es de esperar que tengan la capacidad de negociación como para que estos recortes masivos no puedan ocurrir con la misma facilidad en el futuro. E inspirar a otros a hacer lo mismo.
