Oni-Goroshi: Ciudad de los demonios, la versión japonesa de John Wick

La película Oni-Goroshi: Ciudad de los demonios ha logrado posicionarse como la número 1 en 27 países a través de Netflix, dando una muestra del impacto que está teniendo en la audiencia alrededor del globo. Esta producción, basada en el manga de Masamichi Kawabe, gira en torno a un asesino a sueldo interpretado por Toma Ikuta, quien, tras retirarse para disfrutar de una vida familiar, se ve obligado a buscar venganza tras el brutal asesinato de su esposa e hijos. Los criminales responsables no solo matan a su familia, sino que además logran incriminarlo, lo que da pie a su regreso a la acción 12 años después.

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Dicen que el asesino número uno de la gente vieja es el retiro

A pesar de su éxito, la película ha sido objeto de comparaciones con icónicas sagas del cine de acción como John Wick y Kill Bill. Sin embargo, los críticos coinciden en que Oni-Goroshi se sitúa en un nivel inferior en términos de narrativa y profundización de su universo. A pesar de esto, la película ofrece un espectáculo brutal y violento que, al menos en su primera hora, logra captar la atención del espectador gracias a su enfoque directo y realista.

La dirección de Seiji Tanaka, junto con un guion que prescinde de sutilezas, presenta escenas de acción sin censura que atraerán a los aficionados a este tipo de contenido. Sin embargo, algunos críticos apuntan que la película desbarata al incorporar elementos fantásticos que no añaden suficiente valor a la trama general, lo que provoca que pierda fuerza en la segunda mitad.

Si bien Oni-Goroshi: Ciudad de los demonios ofrece un escape entretenido y violento para los amantes del género, es importante recordar que las comparaciones con John Wick y Kill Bill no son completamente justas, dada la reputación de estas obras maestras del cine de acción.

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