Amigos, lo que habéis oído hasta ahora es cierto. Las nuevas fundas y accesorios FineWoven de Apple para el iPhone son malas. Realmente malas. O eso nos llega desde los medios que han podido probar los nuevos iPhone 15 y sus fundas.
En The Verge explican que llevan una semana dándoles vueltas, mirándolas desde distintos ángulos, cogiéndolas, dejándolas, acariciándolas… Siete días después, siguen sin encontrarles sentido. Y lo dicen claramente “FineWoven es muy malo”.
FineWoven es una nueva opción de tejido que encontrarás en las fundas del iPhone 15, los soportes AirTag y las carteras MagSafe. Apple lo llama “microtwill lujoso y duradero”. No hay YouTuber que no esté desencantado con estas fundas.
De baja calidad y nada baratos, así es FineWoven
Es sedoso, casi resbaladizo al tacto, y cuesta 59 dólares cualquiera de las fundas de teléfono, 35 dólares un soporte AirTag y 99 dólares una de las nuevas correas de reloj: no son las fundas de teléfono más caras que puedes comprar, pero sí bastante caras para lo que ofrece el mercado.
Apple las presenta como una especie de sustituto premium de los accesorios de piel que dejó de fabricar. La empresa ya no venderá fundas y correas de piel para el iPhone porque fabricarlas a escala de Apple “tiene una importante huella de carbono”, según Lisa Jackson, vicepresidenta de política medioambiental de la empresa.
Por lo que si quieres es una funda de primera calidad para tu iPhone, tu nueva opción más sostenible sería FineWoven. O eso nos han vendido desde Apple.
Pero FineWoven no es en absoluto el material de primera calidad que es el cuero. Cuando la periodista de The Verge sacó la cartera MagSafe de su caja, pudo ver claramente algunos lugares en los que ya mostraba desgaste a lo largo de los bordes. Y luego está la prueba de la uña.
Allison explica que si le pones una de estas fundas a tu teléfono, inevitablemente vas a arañarlo por accidente con las uñas, o va a entrar en contacto con las llaves de tu coche.
Y cuando se raya FineWoven, el destrozo es para siempre. En sus pruebas, los arañazos siguen ahí una semana después, sin importar cuántas veces hayan intentado “pulirlos” frotando el dedo sobre ellos.
“Las fundas de piel tenían sus problemas, pero cuando la piel envejece, al menos tiene un aspecto bonito; no así una funda de tela sucia y polvorienta”, explican.
Tal vez FineWoven sería aceptable si costasen la mitad… o un tercio. O tal vez si Apple nunca lo hubiera llamado “funda duradera”. El cabreo es monumental.
