El mejor reloj inteligente del mercado es el Apple Watch, y en este punto casi nadie discute porque es bien sabido por todos. Tanto expertos como usuarios. Por desgracia, el smartwatch solo está al alcance los usuarios con un iPhone como teléfono personal. Pero no siempre fue la idea.
Durante mucho tiempo se ha dicho que si quieres un Apple Watch, tienes que tener un iPhone, ya que el wearable de Apple simplemente no funciona con dispositivos Android.
Sin embargo, las cosas podían haber sido muy diferentes para uno de los mejores smartwatches del mundo, según ha informado hoy Bloomberg.
Compatibilidad con Android para llegar a más gente
Según el artículo, Apple estuvo a punto de lanzar un Apple Watch compatible con Android en un intento de ampliar sus funciones de salud a mucha más gente de la que Apple era capaz de alcanzar hasta ahora. Pero al final la idea, bautizada como Proyecto Fennel, se canceló en el último minuto.
Según el informe, las preocupaciones comerciales se impusieron a las consideraciones sanitarias. El Apple Watch es un impulsor clave de las ventas del iPhone porque es necesario emparejarlo con uno de los dispositivos de Apple. “Si cedieran el reloj a Android”, dijo una fuente de Bloomberg, “diluirían el valor del reloj para el iPhone”.
A diferencia de cuando Apple llevó iTunes a Windows pese a la ferviente oposición inicial del entonces consejero delegado Steve Jobs, parece poco probable que el Apple Watch llegue a usuarios ajenos a Apple en un futuro próximo, si es que llega a hacerlo.
Los usuarios, los verdaderos perdedores
En muchos sentidos, es una pena que el Apple Watch nunca haya llegado a ser compatible con Android. Por otro lado, mantener el Apple Watch como una exclusiva de iPhone también es un movimiento comprensible que ha dado sus frutos de diferentes maneras desde que se lanzó el wearable en 2015.
Según Statista, Apple fue responsable del 22% de los envíos mundiales de wearables (el mayor de una sola marca) en el segundo trimestre de 2023.
El informe de Bloomberg también sugiere que Apple planea hacer grandes avances en las capacidades de salud de su wearable. Esto incluye sus planes de introducir una tecnología que permitiría la monitorización no invasiva de la glucosa en sangre, que no requeriría que el usuario se extrajera sangre.
Y claro, todas estas mejoras podrían salvar vidas a mucha más gente si todos los ciudadanos tuviésemos acceso a esta tecnología, sin importar si somos de Android o de iOS. Ojalá Apple cambie de opinión algún día.
