Muchas grandes empresas quieren maximizar sus beneficios a cualquier precio. Algo que ha encontrado en las IAs generativas algo que les beneficia particularmente. Si no atendemos a ninguna clase de valor ético o artístico, mientras no se regule su uso de forma más estricta, muchos CEOs y directivos van a ver en las mismas un modo de generar contenido barato. Eso es lo que ha ocurrido recientemente con Hasbro. Con una oposición tan negativa como cabría esperar de la situación.
Todo comenzó el pasado 1 de marzo, cuando el CEO de Hasbro, Chris Cocks, dio una entrevista a Venture Beat donde hizo algunas declaraciones potencialmente polémicas. La peor de ellas fue que con 50 años de historias de Dungeons & Dragons y 35 años de cartas de Magic: The Gathering, en Hasbro tienen una veta muy profunda e interesante que minar para alimentar a la IA generativa. Literalmente decenas de millones de palabras y más de 15.000 cartas que, en sus propias palabras, «podemos explotar».
Por supuesto, estas palabras no sentaron bien entre los fans de ambas franquicias de Wizards of the Coast, dueña de Dungeons & Dragons y Magic: The Gathering, y subsidiaria de Hasbro. Algo que se hizo notar en redes de forma radical, pero que acabó llegando más allá.
Según declaró Denman Rooke, artista que trabaja en Magic: The Gathering, él y otros artistas de la casa escribieron una carta abierta a Wizards of the Coast y a Hasbro declarando su firme oposición contra la IA Generativa. Afirmando que, en el momento que alimentaran la IA con su trabajo, ellos dejarán de trabajar para Wizards of the Coast en ese mismo instante. Algo que no desean hacer, porque se declaran apasionados de su trabajo, pero que están dispuestos a hacerlo, por el bien de su propio arte.
La respuesta de Wizards of the Coast no se hizo esperar. Poco después, la compañía les contestó que Wizards también está en contra del uso de IA generativa para realizar cualquier forma de arte. Algo que ha quedado demostrado cuando, en el pasado reciente, trabajaron por eliminar una ilustración generada de esta manera que logró pasar su filtro de calidad.
Por desgracia, la cosa no ha quedado aquí. Porque algunos usuarios de redes sociales, descontentos con la respuesta, aprovecharon para hacer reflotar un comentario del diseñador jefe de Magic: The Gathering, Mark Rosewater.
En su página de Tumblr donde responde preguntas de los usuarios, Blogatog, le preguntaron a Rosewater sobre su opinión de utilizar la inteligencia artificial específicamente para asistir con el diseño y el balanceo del juego. Algo a lo que Rosewater contestó que cree que la inteligencia artificial será una herramienta que llegará un día que usarán, pero que hasta que llegue ese momento aún queda mucho camino por recorrer. Algo que algunos usuarios decidieron interpretar de la peor forma posible, asociándolo con la posición sobre las IA de Cocks.
Por supuesto, existen evidentes diferencias entre lo que dice Rosewater y Cocks. El primero no dice que sea deseable utilizar la IA ni está en su mano tomar la decisión final de si se utiliza o no. Algo que no ocurre con el segundo. Del mismo modo, no todos los usos de la IA son perniciosos para los trabajadores y el público. Diseñadores gráficos, artistas, científicos y programadores llevan años utilizando IA para asistirles en su trabajo, y sería razonable si llegara un punto en el que también fuera posible para los diseñadores de juegos de mesa. Porque si bien todas las IA generativas son IAs, no todas las IA son IAs generativas. Y solo estas últimas son perniciosas.
En cualquier caso, la presión sobre Hasbro parece que ha funcionado. El pasado 19 de marzo, la compañía estadounidense sacó un comunicado afirmando que son responsables de utilizar estas IAs generativas de una forma que no perjudique a los artistas. Por eso han dado la capacidad a sus equipos de decidir si estas herramientas son beneficiosas para el negocio, los fans y la comunidad.
Todo esto demuestra el momento extremadamente convulso en el que vivimos. Las IAs generativas parece que están aquí para quedarse, al menos hasta que se legislen por parte de los gobiernos, pero la reacción a las palabras del CEO de Hasbro demuestran que no tiene porqué ser algo que ocurra si no queremos. Ahora sólo falta no demonizar toda una tecnología por lo que hace un aspecto pernicioso de la misma.
