Publicidad

Noticias

Este nuevo anime tiene dividido a Internet, ¿es una atrocidad o una genialidad?

Internet no se pone de acuerdo si la adaptación de un conocido manga tiene la mejor animación del año o una de las peores animaciones en mucho tiempo

Este nuevo anime tiene dividido a Internet, ¿es una atrocidad o una genialidad?
Álvaro Arbonés

Álvaro Arbonés

  • Actualizado:

A veces las apariencias engañan. Aún más en el caso del anime. Animaciones que parecen extremadamente elaboradas y costosas pueden ser muy fáciles y baratas de desarrollar y animaciones que parecen sencillas y muy poco complejas pueden ser una auténtica pesadilla equivalente a un pozo sin fondo de recursos y dinero. Esto, que ocurre en todos los medios, es aún más evidente en el anime por el desconocimiento que se tiene de cómo funciona la animación. Y esto se ha demostrado en uno de los animes de esta nueva temporada que más dando que está dando que hablar, La chica que me gusta se ha olvidado sus gafas, disponible en Crunchyroll.

Creado por Koume Fujichika, La chica que me gusta se ha olvidado sus gafas es una adaptación del manga homónimo que se centra en la historia entre Kaede Komura, un chico de instituto que tiene un crush en una compañera de clase, y esa misma compañera, Ai Mie, la cual siempre olvida sus gafas. Toda la historia es una comedia romántica sobre el absurdamente enorme crush que tiene él, lo poco que ve ella sin gafas y todos los malentendidos que van ocurriendo constantemente entre ellos debido a la mezcla de estos dos elementos.

Como manga, La chica que me gusta se ha olvidado sus gafas es una comedia romántica más. Sus personajes tienen un diseño con personalidad, el dibujo es bueno y el guion es gracioso, pero nunca hace nada fuera de la norma. Sin embargo, el anime está arrasando entre el público. ¿Por qué? Por lo fastuoso de su animación.

Adaptado al anime por el estudio GoHands, el primer capítulo de la serie tiene todos los elementos que han hechos populares al estudio. Muchísimos movimientos de cámara, colores muy brillantes, ángulos de cámara imposibles, muchos travellings y una obscena cantidad de planos aberrantes. Cosas muy poco comunes en el anime, lo cual le dan un aspecto fastuoso, lujoso, que han hecho que muchas personas se hayan lanzado a las redes a alabar sus cualidades cinematográficas y la imposibilidad de que mantengan el nivel de calidad de la serie en subsiguientes episodios. Algo que no pocos usuarios de redes sociales han señalado, acertadamente, que demuestra la ignorancia que se tiene al respecto de cómo funciona la producción de anime.

Crunchyroll DESCARGAR

En realidad, la animación de La chica que me gusta se ha olvidado sus gafas no tiene una especial calidad técnica. Usando interpolación de IA y modelos 3D, con una práctica total ausencia de pulido, la animación se viene abajo en cuanto se observa con un mínimo ojo crítico. Extremidades que se distorsionan sin sentido, jardines que son texturas 3D de césped pegada, y una paleta de colores y una composición de cámara que, la mayor parte del tiempo, no parece tener más sentido que el hecho de ser espectacular, demuestran que no hay un gran trabajo de pulido detrás de ese trabajo previo. Es decir, no sólo la animación no es particularmente buena, sólo es espectacular, sino que además no tiene mucho trabajo detrás, y por extensión, no tiene porqué suponer un buen mordisco al presupuesto.

Esto, por supuesto, se ha señalado en redes de la peor manera posible: antagonizando con quienes les parece espectacular la animación. De ese modo, se han creado ya dos facciones al respecto de la serie. Por un lado, quienes asocian la espectacularidad de su animación con la calidad de la misma; por otro lado, quienes creen que disfrutar de esa espectacularidad demuestra ignorancia, si es que no directamente estupidez.

El punto razonable recae, por supuesto, en un punto medio. Si bien es cierto que la serie no tiene una animación de gran calidad, eso no quita para que sea muy espectacular, aunque sea de un modo tosco y muy poco pulido. Por eso es natural que para quienes no sepan de animación, sean más impresionables o puedan ignorar sus defectos, puedan quedar impresionados por la misma. Aunque también es lógico que, dado que la serie tiene un guion endeble y toda esta espectacularidad solo sirva por la espectacularidad misma, los puristas de la animación sólo vean en esto un ejercicio vacuo de fuegos de artificio.

Lo que sí es evidente es que, el espectador medio, no sabe cómo funciona la animación. Y es normal. El espectador medio no tiene por qué ser experto en animación, cómo funciona y qué hace a una animación buena o no. Especialmente cuando rara vez se habla en términos cinematográficos del anime. Por eso, aunque de momento La chica que me gusta se ha olvidado sus gafas es el anime del que más se está hablando, quizás no lo sea por las mejores razones. Ya que incluso si no es la mejor serie ahí fuera, lo que está claro es que da para un análisis más interesante que señalar como ignorante a quien la disfrute o como esnob al que no.

Crunchyroll DESCARGAR

Algunos de los enlaces añadidos en el artículo forman parte de campañas de afiliación y pueden representar beneficios para Softonic.

Álvaro Arbonés

Álvaro Arbonés

Periodista cultural y escritor con especial interés en lo audiovisual y todo lo que se pueda jugar. No he venido a hablar de mis libros, pero siempre puedes preguntarme por ellos si tienes curiosidad.

Lo último de Álvaro Arbonés

Directrices editoriales