El Señor de los Anillos ha tenido muchos videojuegos a lo largo del tiempo. Es una franquicia popular que ha dado para aventuras intensas, interesantes juegos de estrategia, e incluso algunos MMO y juegos de supervivencia. Cualquiera que no esté familiarizado con la obra original podría pensar que El Señor de los Anillos es una obra particularmente violenta o enfocada en la aventura. La realidad, es que tiene mucho de viaje, cuidar unos y de otros y la belleza de la vida rural. Algo que es donde se centra el nuevo juego de El Señor de los Anillos.
Tales of the Shire: Un juego de El Señor de los Anillos nos sitúa en Delagua, una idílica aldea de La Comarca donde encarnaremos a un hobbit que vive plácidamente sus días. El propósito de este cozy game es conseguir celebrar el mejor Festival de Delagua que haya visto nunca La Comarca, todo mientras nos dejamos llevar por la plácida vida de los hobbits.
El juego está siendo desarrollado por Wētā Workshop, quienes han comentado bastante detalles sobre el juego. La directora de producto, Kelly Tyson, ha incidido en que «Tales of the Shire aporta una nueva y acogedora dimensión a la forma en la que los fans pueden experimentar la Tierra Media, aderezada con muchas mecánicas edificantes y centradas en los hobbits para ganarse a quienes hacen sus pinitos en el género».
Esto significa que si estás familiarizados con los llamados juegos cozy, o de granjas, aquí estarás en casa. Instalarte y decorar tu particular agujero hobbit, pescar, cocinar, recolectar y cultivar serán mecánicas predominantes de Tales of the Shire: Un juego de El Señor de los Anillos. Además, podrás compartir alguna de las siete comidas del día de los hobbits con tus vecinos y afianzar tus relaciones ayudándoles a establecer una granja, entre otras actividades.
Aunque aún no tiene fecha de salida, sí sabemos que Tales of the Shire: Un juego de El Señor de los Anillos llegará a finales de este año a PlayStation 5, Xbox Series X, Xbox Series S, Nintendo Switch y PC. Eso y que no podemos esperar a mudarnos a nuestro propio agujero en la idílica Delagua.