Recuerdo el día en que obtuve el carné de socio de la famosa tienda de videojuegos GAME. Fui con mi madre, ya que por aquel entonces yo era menor de edad, y tras hacerse ella socia, pude finalmente alquilar un juego de segunda mano al que tenía muchas ganas: Resident Evil: Deadly Silence, para Nintendo DS (poco se habla de lo mucho que disfruté ese juego).
Con el paso de los años, fui alquilando y comprando otros juegos de segunda mano de GAME que me iban interesando, rebuscando durante minutos entre extensas pilas de juegos donde los FIFA, los Call of Duty y los Assassin’s Creed abundaban por encima de todo. Eran ratos que recuerdo con gran cariño y que, dentro de poco, serán exclusivos de la memoria nostálgica de aquellos que lo vivimos.
Y es que, tal y como recoge Eurogamer, la división británica de esta famosa tienda de videojuegos, GAME UK, ya no permitirá el intercambio de juegos físicos a partir del 16 de febrero. De esta forma, los usuarios británicos cuentan únicamente con un mes para vender sus juegos en GAME e intercambiarlos por tarjetas regalo o por crédito de la tienda (en España también se ofrece el dinero en efectivo como opción, aunque la cuantía siempre es menor).
Esto también se aplicaría, como resulta obvio, a la compra de juegos de segunda mano, aunque no queda claro si las unidades en stock dejarán de estar a la venta el mes que viene o seguirán hasta que se agoten las existencias.
Es la crónica de una muerte anunciada: desde hace varios años, los precios de los juegos de segunda mano a la venta en GAME están por las nubes, siendo casi parejos en muchas ocasiones con los de los juegos nuevos. Con esta decisión, la arena del reloj ya comienza a caer y es solo cuestión de tiempo que el resto de las divisiones de todo el mundo (incluyendo la española) hagan exactamente lo mismo.
