Llevamos unos días comentando el gran problema que tiene Apple con sus dos relojes más avanzados: el Watch Series 9 y el Watch Ultra 2. Un tema de patentes impide a la compañía americana venderlos en su territorio. Y hoy hemos descubierto la segunda parte de la historia.
Según informa Bloomberg, Apple no va a poder reparar problemas de hardware (como pantallas rotas) en ningún smartwatch de Apple que esté fuera de su garantía estándar de un año, desde el Apple Watch 6 que se lanzó en 2020.
Apple se pondrá en contacto con los clientes cuando se vuelvan a ofrecer reemplazos, según un memorando de los empleados visto por Bloomberg. Sin embargo, todavía se puede ofrecer asistencia con problemas relacionados con el software del Apple Watch.
Y aún más, si tienes un Apple Watch que aún está dentro de su periodo de devolución de 14 días, no vas a poder cambiarlo por otro modelo (un color o tamaño diferente, por ejemplo), pero se seguirán aceptando reembolsos mientras dure la prohibición.
Una pelea que puede pasarle factura a Apple
Todo esto supone un enorme quebradero de cabeza para Apple, que lucha contra las reclamaciones de patentes presentadas por una empresa llamada Masimo. Masimo insiste en que la tecnología que Apple utiliza en el sensor de oxígeno en sangre del Apple Watch infringe sus propias patentes.
Por el momento, no está claro cuánto va a durar el proceso legal, pero la Comisión de Comercio Internacional (ITC) de EE.UU. ha decidido que las reclamaciones tienen fundamento suficiente para imponer una prohibición a los modelos más recientes del Apple Watch.
Apple tampoco puede importar más smartwatches de sus fabricantes a EE.UU., así que aunque los minoristas podrán seguir vendiendo los wearables por el momento, las existencias no durarán para siempre.
