Este pasado fin de semana se estrenaba la Kings League en televisión. Después de una primera temporada donde sólo se ha podido seguir a través de diferentes plataformas de Internet, la competición ideada por Gerard Piqué dio al salto a la televisión convencional, esa de toda la vida que probablemente tengas en el salón con varios canales sintonizados.
Los guarismos que publicábamos aquí hablaban por sí solos: había logrado un 3,5 % de share con 382.000 espectadores. No eran datos buenos, dado que se situaba como la quinta cadena más vista en esa franja horaria, muy por detrás de las tres primeras, y algo más cerca de la cuarta. Ahora bien, la pregunta es otra: ¿se puede considerar fracaso la Kings League?
Tal como se comentaba en el post de las audiencias del otro día, quizás sea osado considerar de “fracaso” a la Kings League en la televisión convencional. Que no ha funcionado está claro, no hay duda de eso, pero es que la realidad también habla por sí sola: Cuatro, cadena donde se emite la competición, fue también la quinta más vista del día durante los fines de semana anteriores. Por tanto, su posición en el ranking permanece inalterable, aunque con la diferencia de obtener unos números levemente superiores en lo previo a la Kings League.
Con todo esto tras de sí, el verdadero reto se sitúa ahora en otro punto, que no es más que ver las audiencias de semanas próximas. Si esta próxima jornada los números son todavía peores e incluso se baja de puesto, entonces será un aviso; si este descenso se prolonga durante varias jornadas, el indicador no podrá ser más claro: la Kings League no funciona en la televisión convencional.
Sobra decir que en Twitch sigue obteniendo buenos dígitos, así que no es tanto una cuestión de formato, sino más bien de audiencia a la que te diriges.
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