La palabra “colas” y “World of Warcraft” está más asociada de lo que parece. El popular MMORPG siempre se ha caracterizado por contar con largas esperas a la hora de entrar en los servidores para jugar, sobre todo cuando se lanza algún nuevo juego o expansión (esto ocurre con todos en su puesta de largo, también hay que decirlo).
¿Cuál ha sido la última para que se formen estas colas? Pues la gracia está en que todavía no se ha lanzado, sino que llegará a finales de este mes con Wrath of the Lich King Classic. Y aquí viene el problema: muchos jugadores han entrado de golpe al juego para disfrutar antes de WoW… y se han encontrado con que los servidores no dan para más.
Esta práctica es bastante habitual dentro de las empresas. Cuando el título en sí no tiene picos de actividad, muchos servidores se cierran o se realizan mantenimientos. De esta manera, se “tira” con menos potencia, dado que no se necesita más. Sin embargo, desde Blizzard no se esperaban este salto de actividad con jugadores que ya se preparan de cara al regreso de la expansión.
Lo comentado en foros y redes sociales no deja lugar a dudas: los usuarios están entrando en cola a eso del mediodía para poder acceder al juego durante la noche. Son horas y horas de permanencia en cola de acceso a los servidores, lo que habla mal del estado en el que actualmente están los servidores. Blizzard se estaba preparando para el lanzamiento, no para días antes, y esto es lo que sucedido.
Todo apunta a que cuando se lance Wrath of the Lich King estarán subsanados gran parte de estos errores. No obstante, vete preparando para lo peor, que nunca se sabe…
