En un mundo donde las distracciones están a la orden del día, encontrar formas de mantener la concentración es esencial. Apple, consciente de esto, ha incluido una característica muy en macOS desde Ventura y versiones posteriores: los sonidos de fondo. Una función, diseñada para fomentar la concentración y la calma, que nos ofrece una solución bien efectiva para minimizar distracciones en nuestro entorno de trabajo o estudio.
Una fuente de sonidos con los que concentrarnos mejor
Originalmente introducidos en el iPhone, los sonidos de fondo en el Mac tienen el mismo objetivo: ofrecer paisajes sonoros ambientales que ayudan a enmascarar ruidos ambientales no deseados. Esto es particularmente útil en espacios de trabajo o estudio, donde el ruido externo puede ser una fuente constante de distracción.
La variedad de sonidos disponibles es uno de los puntos fuertes de esta función. El poder usarlos sin necesidad de conexión a internet —por lo que no tendremos que compartir la conexión desde el iPhone— es otra. Podemos elegir entre ruidos equilibrados, brillantes y oscuros, así como sonidos naturales como el océano, la lluvia y el arroyo. Los podemos reproducir todos en segundo plano, mezclándose o atenuándose bajo otros sonidos del sistema, lo cual es ideal para crear un ambiente de trabajo o descanso más personalizado.
Acceder a los sonidos de fondo es tan fácil como seguir estos pasos:
- En el menú Apple () elegimos Ajustes del Sistema.
- En la barra lateral seleccionamos Accesiblidad.
- Entramos en Audición bajo el apartado “Audio”.
- En la selección de Sonidos de fondo tocamos en Elegir y seleccionamos el que nos interese escuchar.
- Una vez el archivo se haya descargado tocamos en Listo.
- Activamos o pausamos la reproducción con el interruptor junto a Sonidos de fondo.
Fijémonos, además, que podemos ajustar el volumen de los sonidos de fondo de manera independiente mediante el control deslizante justo debajo de las opciones que acabamos de hablar. También existe una opción para desactivar los sonidos de fondo cuando el Mac no está en uso, lo que automáticamente pausará su reproducción cuando estemos en la pantalla de bloqueo o el protector de pantalla esté activo.
La función de sonidos de fondo de macOS, aunque simple, puede sernos muy útil en más de una circunstancia. Más si la convidamos con el modo No molestar. Cierto es que hay alternativas mucho más completas, pero para aquellos momentos en lo que lo único que queremos es poder concentrarnos en nuestras tareas con algo de sonido ambiental que evite otros ruidos, es más que suficiente. Solo elegimos el sonido que nos interesa y lo activamos.
