En una reciente serie de publicaciones en Threads, Mark Zuckerberg, CEO de Meta, volvió a entrar en la discusión sobre las comparaciones entre el Meta Quest 3 y el Apple Vision Pro, reafirmando su postura de que el dispositivo de Meta no solo ofrece un mejor valor, sino que también es superior en términos de rendimiento y capacidad. Unos comentarios en respuesta a las observaciones de Benedict Evans, quien sugirió que el Vision Pro es el tipo de dispositivo que Meta aspira a desarrollar en un futuro de 3 a 5 años, mientras que el Quest se vende a un precio que Apple buscaría alcanzar en el mismo período.
¿Mejor? Depende de cómo se mire
Zuckerberg, en respuesta, insistió en que el Quest no solo es diferente sino superior al Vision Pro. Criticó el peso, el desenfoque de movimiento y la falta de precisión en los controles del dispositivo de Apple, señalando que cualquier similitud futura en estos aspectos significaría un retroceso para Meta. Aunque reconoció la alta resolución del Vision Pro, argumentó que se logró a costa de comprometer otros aspectos cruciales que, en su opinión, disminuyen la calidad general del dispositivo.
Además, Zuckerberg cuestionó la percepción de que los dispositivos de realidad virtual de Meta están orientados exclusivamente a los juegos. Subrayó la popularidad de las aplicaciones sociales y de fitness en el Quest, argumentando que la plataforma ofrece una experiencia diversa y rica que va más allá del entretenimiento.
Lo cierto es, pero, que Apple no llama al Vision Pro un ordenador espacial por nada. El enfoque de ambas compañías es, en sí, opuesto, aunque seguramente igual de válido. Si nos fijamos en las capacidades técnicas del dispositivo y en especial en el chip, estamos ante el M2 del Vision Pro y el Snapdragon XR2 Gen 2 para el Meta Quest 2. Un chip de escritorio frente a uno de móvil. Solo el TDP, como métrica resumen de la situación, que es de 20 W en el M2 y de solo 9 W en el XR2 ya nos da una panorámica bastante aproximada.
Si Meta tiene algo así como un Android convertido en unas gafas, Apple tiene algo como un Mac convertido en otro tipo de gafas. Ambas compañías han de evolucionar y, aunque en muchos puntos acaben confluyendo, ahora mismo su aproximación es totalmente opuesta. Sin entrar en cuál es mejor, lo que sí está claro es que la competencia siempre es interesante. Veremos cómo evolucionan ambos dispositivos.
