Samsung se ha tomado muy en serio tomar el lugar como la mayor fabricante de teléfonos smartphone y ganar en términos de potencia y extensión de su marca. Ya lo ha hecho en los plegables con su Z Fold y el Z Flip y lo planea de cara al Galaxy S24, que tendrá características que no esperábamos hasta el iPhone 16. En esta ocasión, sin embargo, no es con un smartphone completamente nuevo sino la revisión del Samsung Galaxy S23: el Samsung Galaxy S23 FE. Este teléfono se ha saltado una generación, puesto que el Galaxy S22 FE no existió y por un momento muchos llegaron a creer que no habría más tras el Galaxy S21 FE. Sin embargo, se equivocaron.
No el mejor, pero sí una mejora
Samsung no tiende a revelar de entrada qué chipset habrá en su interior, pero es fácil asumir que el corazón del Smartphone será un Snapdragon 8 de primera generación o el Exynos 2200, según la localización geográfica del comprador. Esto no resulta impresionante comparado con otros chips, pero es una mejora bastante patente respecto al Snapdragon 888 o Exynos 2100 que traía el Galaxy S21 FE. Del mismo modo, la configuración de este año ya ha confirmado los 8 gigas de memoria RAM y deja completamente de lado las memorias de 6 gigas, que empiezan a estar algo desfasadas. ¿Podría tener más? Sí, pero esta crítica también podría hacérsele al Galaxy S23.
Respecto al almacenamiento los usuarios pueden optar por la versión de 128 hihabytes o la de 256, y en cuanto a la cámara es donde la conversación se torna violenta: en el contexto de este terminal un sensor de 50 megapíxeles mejora enormemente los 12 con los que contaba el S21, aunque esto no significa que se pueda equiparar el rendimiento fotográfico con el de las versiones S23 y ni siquiera con el S22, pero sí es una mejora enorme.
El Samsung Galaxy S23 FE se lanza el 5 de octubre con un precio bastante contenido y en un total de seis colores que incluye el color bergamota como exclusivo de la Samsung Store.
