La relación entre las grandes empresas y los derechos laborales siempre ha sido complicada. Así lo ha vuelto a dejar claro Amazon, que alegó el pasado viernes que la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB por sus siglas en inglés) es inconstitucional.
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No se trata de un movimiento aislado. Space X, compañía fundada por Elon Musk, realizó una demanda el pasado mes de enero siguiendo un argumento similar al de Amazon. Esto fue seguido por Trader Joe’s unas semanas más tarde.
Uno de los propósitos de la Junta es presentar denunciar contra los empresarios o sindicatos que, según su criterio, vulneran los derechos labores protegidos a nivel federal. Dicha Junta consta de una fiscalía que es la encargada de llevar estos procesos a cabo.
En este caso, la fiscalía de la Junta acusó a Amazon de tomar represalias ilegales contra los trabajadores de un almacén de Staten Island, sindicada hace dos años. Esto ha hecho reaccionar a Amazon, que argumenta que ellos no han infringido la ley. Además, en su denuncia acusan a la Junta de violar la Quinta y la Séptima Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
Se trata del último intento de Amazon para bloquear la organización de sindicatos dentro de sus centros. Si sus amenazas finalmente surten efecto, los trabajadores estadounidenses podrían perder gran parte de las protecciones laborales, ganadas hace casi un siglo.
Fuente: Techcrunch