La innovación a veces va de la mano con la controversia, especialmente cuando se trata de funcionalidades que tocan aspectos tan delicados como la privacidad y el intercambio de información personal. Un claro ejemplo de esto es el reciente lanzamiento de la función NameDrop, introducida con iOS 17 y watchOS 10, que ha generado un considerable revuelo debido a informaciones erróneas y alarmantes difundidas, sorprendentemente, por varios departamentos de policía y medios de comunicación.
Muchos requisitos para una transferencia que no puede pasar accidentalmente
NameDrop, diseñado para permitir un intercambio rápido de información de contacto entre dispositivos Apple colocados uno al lado del otro, ha sido objeto de advertencias y malentendidos. Tal como recogen en MacRumors, varios departamentos de policía en Pennsylvania, Oklahoma, Ohio y otros estados han difundido la idea de que la información de contacto podría compartirse “solo acercando los teléfonos”. Una afirmación más que inexacta y que parte de un entendimiento erróneo de cómo funciona realmente NameDrop.
La funcionalidad de NameDrop, que viene activada de forma predeterminada va mucho más allá de pasar los contactos solo acercando dos teléfonos. Para que NameDrop funcione, es necesario que ambos dispositivos, ya sean dos iPhone con iOS 17.1 o un iPhone y un Apple Watch con watchOS 10.1, estén prácticamente en contacto y, muy importante, desbloqueados. Solo entonces aparecerá una ventana emergente que invita a los usuarios a compartir información de contacto.
Importante destacar es que la información de contacto no se comparte automáticamente. Solo si nosotros tocamos el botón de compartir en nuestro iPhone desbloqueado y a tocar de otro se enviará nuestro contacto. Más allá de eso, aunque escape ligeramente al caso que nos ocupa, también podemos personalizar qué apartados de nuestro contacto compartimos.
Si bien es fácil suponer la buena intención de los mensajes publicados por autoridades y medios de comunicación, lo cierto es que les faltan algunos detalles de primerísima importancia. La clave está en que NameDrop nunca enviará nuestro contacto a nadie si que toquemos el botón correspondiente en pantalla.
Así, y es algo que podemos comprobar nosotros mismos con otro iPhone, necesitamos que ambos estén desbloqueados —algo que no ocurre en el bolsillo, por ejemplo— estén prácticamente a un milímetro el uno del otro, y las personas implicadas toquen el botón de Compartir para iniciar el proceso. Un sistema a todas luces seguro en el que Apple, sin duda, ha dedicado reflexión para garantizar que, como con todos los servicios de la compañía, nuestros datos siguen siendo nuestros.