La inteligencia artificial ha demostrado que puede aportarnos muchos beneficios, pero también abrir nuevos frentes de “batalla”. En este caso, ha sido Microsoft quién ha saltado a la palestra para advertirnos de lo que ya está sucediendo: los hackers utilizan la inteligencia artificial para hacer más efectivos sus ataques.
Tom Burt, alto directivo de Microsoft centrado en seguridad, ha confirmado que los cibercriminales están desarrollando estrategias más elaboradas y dañinas gracias al uso de la inteligencia artificial. Según explica a The Wall Street Journal, los hackers ya están utilizando herramientas basadas en inteligencia artificial para refinar sus estratagemas, como es el caso del phishing.
El phishing se trata de una de las tácticas más utilizadas por los piratas para acceder a nuestra información. Tal y cómo su nombre indica, los atacantes tratan de hacer que la víctima “muerda el anzuelo” haciendo uso de webs fraudulentas, correos electrónicos falsos o incluso ingeniería social. En este caso, la IA está ayudando a crear “anzuelos” cada vez más creíbles, además de potenciar los programas maliciosos que se emplean.
Estas “mejoras” en las técnicas de los hackers ha añadido un nuevo grado de dificultad a las empresas, que están viendo como cada vez es más complicado protegerse de los ataques. Y no solo eso: también han aumentado en cantidad. Si observamos el período transcurrido entre noviembre de 2022 y junio de 2023, veremos que el números de ataques con ransomware se ha duplicado.
A través del ransomware, los cibercriminales centran sus estrategias en el robo de datos y posterior chantaje, exigiendo un rescate a cambio de no filtrarlos a la red. Para defenderse, las empresas también están acudiendo a la IA para mejorar sus barreras de seguridad y “combatir el fuego con más fuego”, como aclara Lane Bess, director ejecutivo de IA Deep Instinct.
Por otro lado, las autoridades estadounidenses de ciberseguridad y seguridad nacional ya han advertido del peligro que esto supone para los sistemas informáticos gubernamentales. El mes pasado, los altos cargos de empresas tecnológicas como Mark Zuckerberg, Elon Musk y Bill Gates se reunieron en una sesión a puertas cerradas con los senadores estadounidenses para hablar sobre la IA y su cada vez más necesaria regulación.
