Las acciones tienen consecuencias. Hace unos meses, Elon Musk despidió a miles de trabajadores de Twitter en una reducción de gastos drástica y, hasta cierto punto, absurda, que dejó sin personal a departamentos de gran importancia de la red social.
Además de deshacerse de su Consejo de Confianza y Seguridad, que servía para asesorar a Twitter sobre las políticas de moderación de contenido, se deshizo de la mayoría del equipo de moderación en todo el mundo. Y, como podrás imaginar, eso ha tenido consecuencias.
Las cuentas y tuits de desinformación e incitación al odio han aumentado en los últimos meses por culpa de la baja capacidad de moderación de contenidos de Twitter, que deposita sus esfuerzos en las respuestas automatizadas y en la puntual revisión humana. Y esto no le ha debido gustar nada a Alemania, que podría multar a la plataforma de Musk por incumplir una ley nacional que obliga a retirar contenidos de incitación al odio en las redes sociales.
La Oficina Federal de Justicia alemana anunció hace unos días en un comunicado de prensa que ha llevado a cabo un procedimiento en virtud de la Network Enforcement Act, también conocida como la ley alemana de redes sociales o NetzDG, tras determinar que existen “indicios suficientes de fallos” en los procesos de gestión de reclamaciones de Twitter.
La NetzDG establece que las redes sociales deben responder en un plazo de siete días o de 24 horas, en el caso de los contenidos más graves, a las denuncias de contenidos ilegales, comprobando lo que se ha denunciado y eliminando el contenido si se confirma que es ilegal. Este tipo de contenidos ilegales se rigen por el Código Penal alemán, que incluye conceptos como la incitación al odio, el abuso y las amenazas, y el antisemitismo.
Con multas de hace 50 millones de euros, la ley alemana de redes sociales no se ha intentado aplicar hasta ahora a ningún caso de infracción de moderación de contenidos por parte de ninguna red social, algo que denota la gran falta de moderación en Twitter y la gran escalada de contenidos de incitación al odio.
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