China no está dispuesta a dar tregua. Después de las amenazas de veto al iPhone en los estratos gubernamentales del país, ahora han acusado a Estados Unidos de infiltrarse en los servidores de Huawei. Según los asiáticos, está situación lleva dándose lugar desde 2009.
A través de un post en la cuenta oficial de WeChat del Ministerio de Seguridad del Estado de China, afirmaron que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos se había infiltrado en los servidores de Huawei, la tecnológica con sede en Pekín. Acorde a esta información, Washington habría estado vigilando muy de cerca los sistemas de Huawei desde 2009.
Los asiáticos denuncian que Estados Unidos lleva más de una década realizando ataques cibernéticos a más de 40 países del mundo, entre los que también se encontraría Rusia. Además, China acusó a su rival de orquestar ataques contra objetivos chinos desde que Edward Snowden habló sobre los métodos de espionaje de Estados Unidos.
Huawei Mate 60 Pro, el teléfono de la discordia
Lo cierto es que la relación de Washington y Pekín se encuentra bastante tensionada en lo tecnológico. Huawei ha conseguido desatar la alarma en Washington debido a la salida del Huawei Mate 60 Pro, un nuevo teléfono inteligente vitaminado por un chip Kirin más avanzado de la cuenta. Las sanciones impuestas hace años por parte de Estados Unidos sobre Huawei impedían el acceso de la empresa a la tecnología estadounidense necesaria para diseñar este tipo de chips.
Sin embargo, el Kirin 9000S se ha saltado todo esto por la torera. Fabricado en 7 nanómetros, posee unos módulos de RAM SK Hynix que no deberían estar autorizados. Y es que SK Hynix se trata de una empresa surcoreana que no tenía relación comercial con Huawei desde las imposiciones que Estados Unidos ejecutó en 2020.
Por si fuese poco, los estadounidenses también se han sorprendido al ver la fabricación del chip Kirin en 7 nanómetros. Aunque parezca poco importante de primeras, este tipo de fabricación tiene grandes implicaciones dentro del ámbito militar. En el pasado, numerosos estudios relacionaron a Huawei con la milicia china y alimentó el debate sobre el bloqueo de la compañía en el despliegue de las redes 5G.
