Está claro que Succession es una de las series del momento. La ficción que terminó en 2023 se despidió a lo grande, consiguiendo decenas de premios por el camino y con un final que dejó atónitos a los fans. Y, entre otras despedidas, tuvimos la de Logan Roy, el personaje al que interpreta Brian Cox durante toda la serie.
En la serie, Cox dejó muy claro por qué es uno de los actores más valorados de la industria, y no solo eso, sino que ha llegado a rechazar grandes papeles por el camino hasta encontrarse con el bueno de Roy. En su libro su libro de memorias Putting the Rabbit in the Hat, que acaba de lanzar, ha dejado algunas declaraciones interesantes al respecto.
El dinero manda
“Iba a ser el rey Robert Baratheon, quien aparentemente muere cuando es embestido por un jabalí en la primera temporada“, explica Brian Cox al respecto de su posible participación en Juego de Tronos. “Juego de Tronos acabó siendo un gran éxito y todos los implicados ganaron una fortuna, por supuesto. Pero cuando me lo ofrecieron, digamos que no era mucho dinero. Además, me iban a matar relativamente pronto, así que no habría tenido ninguno de los beneficios a largo plazo del éxito de la serie, en los que su salario iba creciendo a cada nueva temporada. Así que pasé, y el jabalí embistió a Mark Addy en lugar de a mí”.
Pero no solo eso. También iba a aparecer en Piratas del Caribe, donde iba a interpretar al Gobernador al que finalmente dio vida Jonathan Pryce: “Habría sido una máquina de hacer dinero, pero de todos los personajes en la película era el más desagradecido, y además habría acabado haciendo una película detrás de otra y perdiendo todas las cosas buenas que he hecho”.
Aunque, en realidad, el rechazo de su oferta fue más bien por la implicación de Johnny Depp en el proyecto: “Otra cosa sobre Piratas del Caribe es que es básicamente el show de Johnny Depp como Jack Sparrow, y personalmente estoy seguro de que él es muy exagerado, está muy sobrevalorado. Piensa en Eduardo Manostijeras. Afrontémoslo, si vienes con manos así, pálido, la cara maquillada con cicatrices… no tienes que hacer nada. Y no lo hizo. Y posteriormente ha hecho aún menos. Pero a la gente le encanta. O le encantaba. Ahora ya no les gusta tanto, por supuesto.”
