Mary Quant, la famosa diseñadora británica que puso de moda la minifalda, falleció este jueves a los 93 años de edad. En un comunicado remitido por su familia, se afirma que Quant “ha fallecido en paz esta mañana en su casa de Surrey (Reino Unido)”.
La diseñadora ha sido una de las figuras más reconocidas del siglo XX dentro del mundo de la moda y también una destacada innovadora de los “Swinging Sixties“.
Londinense hasta la médula, vino al mundo un 11 de febrero de 1930. Su dedicación al diseño venía motivada de su incapacidad de encontrar el tipo de ropa que quería vestir ella misma. Abrió su primera tienda (Bazaar) en el barrio de Chelsea en 1955 y consiguió convertirse en el punto de encuentro de figuras tan reconocibles como Brigitte Bardot, Audrey Hepburn o incluso los Rolling Stones.
Durante los años 60, Quant se convirtió en la imagen del cambio político y cultural londinense. Aunque a menudo no se la considera realmente la inventora, sin duda hizo de la minifalda una prenda que no debía faltar en el armario de las jóvenes. Con su corte de pelo a lo Vidal Sassoon y su creciente reputación como figura del Swinging London, era fotografiada con frecuencia con su sempiterna minifalda (incluso cuando fue condecorada con la Orden del Imperio Británico en 1966).
Sus diseños brillantes y coloridos se inspiraban en subculturas como los mods y los clásicos uniformes escolares. Aunque sus prendas no eran precisamente baratas (algunas podían superar los 100 euros actuales), seguían siendo mucho más baratas que las de otras prestigiosas marcas. Además, no solo popularizó las minifaldas: las medias panty, las máscaras de pestañas a prueba de agua y la apropiación de la ropas masculina también formaron parte de sus contribuciones al mundo de la moda.
Sin duda, supo atraer a las nuevas generaciones de mujeres, las cuáles ya trabajaban y disponían de dinero para gastar en ropa. Tal y cómo dijo Quant en autobiografía (todo un éxito de ventas en 1966), “las jóvenes estaban cansadas de vestir igual que sus madres”.
