Ah, el todo por la audiencia… Esta máxima del mundo del espectáculo se ha adaptado al mundo de las redes sociales de la forma más grotesca posible. En concreto, en Instagram los aspirantes a influencers pueden llegar a cometer auténticas locuras por conseguir la foto perfecta.
Es el caso de una modelo e “instagramera” (si no existe esta palabra, me la acabo de inventar) de 19 años llamada Katarina Zarutskie. Esta se obcecó en hacerse una foto en una cala de las Bahamas atestada de tiburones nodriza.
Siguiendo la regla “como los demás lo hacen, yo también”, Katarina, al ver que había otras personas nadando en la cala, decidió meterse para hacerse una foto.
“Me tumbé haciendo `el muerto´ y, de repente, el tiburón vino, me mordió y me arrastró hundiéndome”, contó la influencer. Por suerte, logró librarse de la mordedura y salir del agua en calma, sin mayor incidente. Su brazo está bien y todo quedó en un susto.
“Soy afortunada de tener mi mano. He sido muy afortunada de que la situación no fuese a más. Son animales salvajes y era una situación que no pude controlar. La experiencia ha sido una gran lección, y recomiendo que la gente que haga este tipo de cosas piense con la cabeza; a fin de cuentas, estás metiéndote en su casa”.
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Leer másA ver lo que tardamos en ver a otro influencer de redes sociales metiéndose en peligro por un “Me gusta”.