Tesla sigue inmersa en la carrera por transformar la industria del automovilismo. Y lo cierto es que la cosa no va mal: la famosa compañía de Elon Musk celebra su primer evento, el Tesla Investor Day, donde hemos podido conocer algunos anuncios importantes y sus planes de futuro.
Lo cierto es que la posición de Tesla dentro del mercado automovilístico no ha estado exenta de baches. La inflación, el aumento de costes, los retrasos y los problemas con sus automóviles han hecho mella, por no hablar del “divertido” año que nos ha dado Elon Musk con la adquisición de Twitter.
Enfoque en la sostenibilidad
El gran mensaje que Musk y los directivos de Tesla querían hacer llegar al público era el siguiente: impulsar por todos los medios el uso de las energías renovables y así, eliminar la necesidad del combustible fósil. Sin embargo, las declaraciones ecológicas de Tesla no calaron en los inversores. La falta de grandes anuncios y más detalles concretos se han saldado con una caída en las acciones de la compañía de un 8,6%.
Sin embargo, la compañía no ha parado de incidir en la transición hacia medios de transporte más sostenibles. Incluso han mostrado el porcentaje que debería tener cada sector para hacerlo posible: 35% las energías renovables, 21% para los vehículos eléctricos, 22% para las bombas de calor,17% para los sistemas térmicos y 5% reservado para el transporte marítimo.
No podemos negar que aún queda un trabajo titánico por delante para revertir esta situación. Actualmente, más del 80% de la energía producida tiene su origen en el combustible fósil.
Aún así, Tesla viene decidida a aportar su grano de arena y asegura que sus planes para mejorar la eficiencia impactarán de forma positiva en el planeta. Como ejemplo tenemos la creciente necesidad de minerales. Y es que una de las mayores preocupaciones a las que se enfrenta la transición energética es la escasez de materias primas. No obstante, una sociedad electrificada requerirá mucho menos según Tesla. La estimación que dan es que podríamos pasar de necesitar 50 gigatoneladas de materiales a 18 gigatoneladas.
Construcción de nuevas fábricas
Durante el evento se debatieron otros tantos temas como el ambicioso objetivo de Tesla: producir hasta 20 millones de coches eléctricos en 20230. Pero, ¿cómo pretenden hacerlo? De momento, esta cifra choca con la realidad actual.
Para ponernos en contexto, Tesla ha entregado 1.313.851 millones de vehículos durante todo 2022. Si comparamos esta cifra con Toyota (fabricante líder del año pasado), Tesla se queda bastante corto: el gigante japonés consiguió colocar hasta 10,5 millones de coches en 2022. Sin embargo, Elon Musk asegura que esta meta es alcanzable, ya que el problema principal al que se enfrentan es la alta demanda.
En respuesta a la situación, Elon Musk confirmó la construcción de la próxima Gigafactory en Monterrey, México. Además, también aseguró que continuarían con la expansión de la producción en todas las plantas ya existentes (California, Nevada, Texas y Shanghai). Según las primeras estimaciones, la planta de coches eléctricos que se instalará en México requerirá de una gran inversión (en concreto, 5.000 millones de dólares).
Reducción de costes de fabricación
Por otro lado, gran parte del evento se centró en hablar sobre la eficiencia operativa de la marca y los esfuerzos que habían dedicado en reducir costes en todos los estratos posibles. Sin embargo, quizás lo más interesante de todo es la información que no se llegó a decir: no hubo ni rastro de vehículos nuevos y tampoco se abordaron los problemas de software de su famosa conducción autónoma. De hecho, esta última opción no está ni siquiera disponible para aquellos que la compraron (15.000 dólares nada menos) debido a su retiro de la circulación.
Si quieres ver por ti mismo el evento de Tesla, lo tienes subido el YouTube en el canal oficial de la compañía. Aquí abajo te dejamos el directo:
