Es un hecho que ‘Star Wars’, de un tiempo a esta parte, es una saga que no apetece tanto como antaño. Y es que la sobresaturación de series, cómics, novelas y videojuegos ha convertido a la saga en algo muy diferente al evento que era antes: ahora, cada nuevo anuncio de la saga es recibido más con un gruñido de rutina por parte de los fans que con la algarabía de antaño. Y como prueba definitiva, el primer producto a lo grande en más de cuarenta años que fracasa de manera… galáctica. A lo pequeño tenemos miles de ejemplos. Algún día iremos con ello, cuando la Fuerza nos acompañe.
Hotel láser
Con la compra de Lucasfilm, Disney trató de sacar toda la rentabilidad posible a la saga galáctica de George Lucas: una nueva trilogía, películas independientes, series en Disney+, un universo expandido oficial, uno no oficial… Y, claro, la posibilidad de formar parte de sus parques de atracciones, que, obviamente, no iban a desaprovechar. Son Disney, al fin y al cabo. No les fue mal: por ejemplo, ‘Rise of the resistance’ es una montaña rusa ya adorada por los visitantes de Disneyland y Disney’s Hollywood Studio que demostraba que, si se hacía bien, la saga aún estaba muy lejos de cansar a sus fans.
Y con este ánimo, Disney construyó un hotel de dos pisos en el que los huéspedes vivirían una aventura personalizada durante dos días en el universo galáctico. Su fabricación duró cinco años… Pero se mantendrá abierto tan solo uno y medio. Por muy emocionantes que fueran las aventuras prometidas en ‘Galactic Staircruiser’, que así se llama el invento, no todo el mundo está dispuesto a pagar 1200 dólares por persona y noche para no salir de un recinto cerrado en el que no hay ventanas para vivir, aún más, la “inmersión”.
En última instancia, ‘Galactic Staircruiser’ pedía mucho -demasiado- del fan: embutirse en trajes, hablar con los Stormtroopers, crear sus propias tramas y dormir lo menos posible para tratar de sacarle todo el jugo a una experiencia que, ya os avanzamos, no vale ni de lejos los 1200 dólares que cuesta. Ventanas al espacio, droides y aliens que hablan contigo te transportan al universo ‘Star Wars’. Suena bien, claro… pero si pagáramos mil dólares menos. Por ponernos en perspectiva, 1200 euros es lo que te puede costar una semana en algunos países europeos y asiáticos. No compensa por mucho brilli-brilli que tenga.
Los huéspedes pueden aceptar misiones, elegir un bando, quedar en lugares, imaginar todo tipo de planes… Pero, por muy inmersivo que fuera, nadie paga un dineral para quedarse dentro de un hotel cuando va a Disneyworld. Y sin tener datos específicos, se puede intuir que ha sido tal fracaso que ni siquiera han intentado resucitarlo bajando un poco los precios: a finales de septiembre habrá un último viaje, así que si estabais esperando una oportunidad, es el momento de ir.
¿No te sobran 1200 euros, a los que hay que sumar viaje y entrada a Disneyworld si quieres ir dejando de lado el hotel, y otros 1200 si viajas solo porque te cobran habitación doble? Aunque los que han ido están apasionados, vas a necesitar algo más que utilizar la Fuerza para disfrutar sin acordarte de que estás pagando un dineral por una experiencia que, encima, ha sido un sonoro fracaso estelar.