Pocos tiros en el pie hay más grandes que el que se hace a sí mismo el juego oficial de la Fórmula 1 cada año: el de no salir de manera simultánea al inicio de la temporada. Cuando el fútbol da el pistoletazo de salida, todos sabemos que la nueva entrega de FIFA sólo tardará unas semanas en llegar al mercado, pero con el título de la F1 no ocurre así, ¿por qué?
Este interrogante es uno de los más repetidos por parte de todos los jugadores, y la respuesta es incierta si tenemos en cuenta que no hay información oficial como tal. No obstante, sí contamos con suposiciones y esos rumores que se deslizan entre desarrolladores y ejecutivos, como es el caso del importante secretismo que se mantiene en torno a los coches oficiales.
Como bien sabrá el amante de la F1, los monoplazas no se conocen hasta prácticamente el inicio de la temporada. En otras palabras, no sabemos públicamente el diseño o especificaciones del Aston Martin desde hace un año o más, por ejemplo. La confidencialidad es enorme debido a la competitividad existente entre las diferentes escuderías, de ahí que estos datos no se desvelen a nadie; y aquí entra el estudio de desarrollo de turno, quien no tiene más remedio -como es lógico- que atenarse a las reglas del juego para que nadie se vaya de la lengua.
Si no hay datos, no hay juego. Así de simple. Cierto y verdad es que Codemasters puede ir trabajando en multitud de apartados diferentes, pero no puede recrear ni diseños ni sensaciones hasta que los coches echan a correr o se conocen valores. Por tanto, los desarrolladores pueden trabajar en gameplay, modos y demás, pero no en aquella información más destacada. Con todo esto tras de sí, lo que se origina es que el videojuego no lo vemos hasta verano, cuando ya ha transcurrido la mitad de la competición.
Esta problemática podría contar con más puntos de fricción, pero la realidad es que el resto de elementos no ofrece lugar a confusión. Al fin y al cabo, la normativa de la FIA (Federación Internacional del Automóvil) sí se puede integrar desde tiempo antes, así como otras variantes. La complejidad radica, por tanto, en coches y pilotoso. Sin más.
Esta es la explicación más comentada entre bambalinas cuando se pregunta por qué F1 2023 no es una realidad en estos momentos, más cuando comienza la competición y en países como España hay muchas ganas de ponerse al volante del Aston Martin de Fernando Alonso. A falta de información oficial, tocará esperarse, aunque no existe ni fecha de lanzamiento para este año. Y dudamos que sea por Electronic Arts, que si por ellos fuera… ya estaría a la venta.
Si algún jugador quiere disfrutar de un videojuego de la F1 en estos momentos, no le queda más remedio que recurrir a la última versión. Por ejemplo, en estos momentos está dentro del servicio de suscripción Xbox Game Pass. Por otro lado, si te gusta más la simulación y la gestión de carreras, F1 Manager 2022 está gratuito en Steam. Aunque la modalidad es totalmente diferente a lo que propone F1 2023, desde luego también vas a tener conducción para rato.
