Elon Musk sigue con su cruzada para “mejorar” Twitter (ante sus ojos, al menos). Tras la desbandada de desarrolladores y trabajadores de la plataforma, el sudafricano capea el temporal como puede y ha anunciado que se avecinan cambios. Entre estos, hay una nueva actualización dentro la política de moderación de contenidos: “libertad de expresión, pero no de alcance“.
No contento con eso, Musk también ha decidido restaurar las cuentas suspendidas de perfiles tan polémicos como Donald Trump o Kanye West, entre otros. Esta decisión se hizo oficial después de que el magnate realizara una encuesta informal desde su propio perfil de Twitter.
Libertad de expresión para todos
Elon Musk siempre se ha mostrado públicamente como un firme defensor de la libertad de expresión. Cuando se hizo oficial la compra de Twitter por su parte, Musk afirmó haber “liberado al pájaro” de la “censura” que según el, imperaba en la red social.
En otra de sus famosas encuestas, el magnate preguntó a los usuarios si Twitter debía ofrecer una amnistía general a las cuentas suspendidas, “siempre y cuando no hayan infringido la ley o realizado spam”.
El peculiar uso que hace Elon Musk de las encuestas contradice uno de las grandes promesas que hizo al comienzo, la creación de un consejo de moderación de contenidos. Sin embargo, parece que cambió radicalmente de opinión tras acusar a los activistas y políticos que “querer matar Twitter” quitando los ingresos que generaba gracias a la publicidad.
Con los próximos cambios, veremos como Twitter volverá a permitir las noticias falsas, los mensajes de odio y todo tipo de expresiones siempre y cuando no supongan una violación de la ley. Sin embargo, a Musk no le preocupa esta situación; aunque admita estos mensajes, les quitará visibilidad. Según sus palabras, “no encontrarás el tweet a menos que lo busques de manera específica”.
Las declaraciones de Musk son un tanto ambiguas: ¿qué es un tweet bueno o malo? ¿qué estrategia seguirán para ello? Por ahora, nada de esto ha sido aclarado y parece que tocará esperar para verlo en acción.