A medida que avanzan los episodios de The Last of Us, se va descubriendo más y más sobre el cordyceps, el hongo que provoca el apocalipsis en la serie. La incorporación de Craig Mazin a la ficción, famoso por dirigir la impecable Chernobyl, se está notando con creces gracias a las introducciones de cada episodio.
Gracias a estas introducciones, sabemos más sobre el motivo por el cual todo se ha ido al traste en la serie, incluso completando la información que nos llegó en los juegos originales. Y en la apertura del segundo capítulo se ha confirmado algo que ya se dejó caer en el primero: que el hongo se reprodujo en harina contaminada.
En el capítulo 1 de The Last of Us pudimos ver cómo Joel y su hija Sarah tienen un problema con la harina. Sarah no puede cocinar tortitas porque no le queda, él se olvida de comprar la tarta y los dos rechazan comer galletas de sus vecinos. Poco después vimos que esta familia estaba infectada, y no comer la harina puede haber sido la clave por la cual no fueron contaminados en primera instancia.
En el segundo, la introducción nos lleva hasta Yakarta. Después de que la TV que mira Joel avisara que la crisis sanitaria comenzó allí, viajamos hasta la fábrica de harina donde ocurrió todo. Allí, una mujer experta en micología es llamada con urgencia para visitar al paciente cero, y su respuesta sobre qué hacer es rápida y tan apocalíptica como lo que ocurriría después: “tenemos que quemarlo todo“.
¿El cordyceps es real?
Como ya os contamos, el cordyceps es un hongo real que, aunque no afecta en humanos, cuenta con una base científica lo suficientemente sólida como para que se haya podido crear un videojuego y una serie en torno a una supuesto amenaza mayor.
Y, en el caso de su reproducción en la harina, tampoco es algo tan extraño. Muchos tipos de hongo crecen en los cereales de forma masiva, y la harina es uno de los más prolíficos para ellos. Por ejemplo, el hongo cornezuelo es un parásito que afecta a muchos cereales y plantas, sobre todo en el centeno, y es muy peligroso porque sus toxinas pueden provocar alucionaciones, ardores y convulsiones.
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En ciertas instancias, el consumo humano de este hongo puede llevar a la amputación de ciertos miembros del cuerpo. Y, aunque ya no ocurre tanto, en la Edad Media era un problema especialmente propagado. Este hongo puede, incluso, haber sido el que provocó el Baile de San Vito, una historia clásica basada en hechos reales en la que se dice que cientos de personas salieron a bailar descontroladamente hasta caer desfallecidas.
Si estamos en lo cierto con esta teoría que ya parece confirmada, esto repercutiría directamente en otra de las más sonadas de The Last of Us: que el cuerpo humano es como un pan; es decir, que aporta las vitaminas y la temperatura idóneas para que el hongo prolifere y crezca a su paso.
Como estamos viendo en los capítulos de The Last of Us, el cordyceps es tan peligroso que incluso se conecta con todos los seres que ha parasitado y puede detectarte allá adonde estés. Veremos si en los próximos episodios se sigue explorando esta pandemia que, de momento, está siendo la base central de la ficción de HBO Max.
