Hogwarts Legacy es, quizás, uno de los juegos más esperados de la década. Desde que Harry Potter se convirtiera en el fenómeno de la literatura más importante del siglo XX y XXI, el fandom no ha dejado de exigir un videojuego que estuviera a la altura. Porque, aunque los de las películas originales tienen sus fans, nunca han podido retratar tan dignamente lo que es adentrarse en este mundo mágico.
Sin embargo, el lanzamiento del juego no ha sido tan digno como cabría esperar, y la culpa la tiene JK Rowling. La autora lleva unos años protagonizando polémicas por su transfobia (odio al colectivo trans), y es algo que una gran mayoría de sus seguidores iniciales ha denunciado.
¿Qué han hecho los streamers?
Esta polémica, sobre la que ha llegado a hablar hasta Daniel Radcliffe para defender al colectivo trans, ha provocado que muchos se nieguen a jugar a Hogwarts Legacy. La principal razón es que Rowling verá dinero de cada compra que se haga del título, debido a la compra de los derechos de sus libros, y muchos creen que luego lo empleará para atacar a las personas trans.
Esto, por supuesto, ha desencadenado todo tipo de comentarios y reacciones por parte del público. Pero ¿qué han hecho los streamers, que quizás sean los más afectados aquí? Bueno, en resumen, nada.
Aunque ha habido algún posicionamiento concreto, este vídeo de Alexelcapo resume a la perfección la posición de los streamers:
En su caso, streamer de videojuegos que sí se moja en sus opiniones y ha hablado sobre el odio de Rowling hacia el colectivo, cree que no puede no jugar porque “se lo debe a su yo de 11 años”. Del mismo modo ha pasado con la mayoría de streamers. Solo hay que echar un ojo a Twitch para darse cuenta de que está todo el mundo jugando en masa al juego de Harry Potter, así que parece que el supuesto boicot no ha funcionado en absoluto.
En el caso de Girlfriend Reviews, una pareja de streamers internacionales conocidos por su apoyo a causas de este estilo, el tema ha ido a más. Tras recibir un código del juego, lo probaron en directo y comenzaron a recibir críticas de todo tipo, hasta que Shelby, una de los dos streamers, terminó llorando. Pero, para aclarar esto con la comunidad, acabaron recaudando dinero para The Trevor Project (una organización sin ánimo de lucro que apoya al colectivo LGTBIQ+) mientras jugaban al juego:
A tanto ha llegado esta pugna que incluso se ha creado una página en la cual puedes buscar si un streamer ha jugado a Hogwarts Legacy en directo. Evidentemente, con la intención de hacerle boicot después:
Actualmente, la web aparece deshabilitada, probablemente por la polémica que ha traído consigo. Pero, por más que una parte haya abogado por este boicot y generado esta polémica por culpa de JK Rowling, el juego es el más jugado en la plataforma de streaming y tiene toda la pinta de que va a lograr unas ventas extraordinarias.