Unos científicos descubren dos gusanos de hace unos 40.000 años congelados y deciden reavivarlos para estudiarlos. No, no es la premisa para un nuevo remake de La Cosa o de un episodio de Expediente X.
Se han encontrado dos pequeños nematodos (conocidos vulgarmente como gusanos redondos) atrapados en permafrost (capa de suelo congelado pero no cubierto de hielo o nieve) en dos zonas del norte frígido de Rusia. Unos científicos locales, en asociación con la Universidad de Princeton, han calculado que estos gusanos tendrán entre 32 mil y 42 mil años de antigüedad. Son, por tanto, los organismos vivos más antiguos de la Tierra.
Estos gusanos (que espero que no desaten ningún virus primigenio que nos convierta en zombies) están literalmente vivos: se mueven, comen y poco más (los gusanos no es que tengan una vida social muy diversa, que digamos). Son originarios del Pleistoceno, una era que empezó hace unos 2.6 millones de años y termino hace nada, 12 mil años. Es la conocida Edad de Hielo, donde los dinosaurios ya se habían extinguido y los primeros humanos, por llamarlos de alguna forma, compartían planeta con criaturas más pequeñas.
Nos encontramos más allá de una anécdota: estos dos seres podrían enseñarnos mucho sobre cómo la vida puede persistir durante miles y miles de años en estado congelado. Algunos astrónomos creen que estos organismos podrían ser transportados entre planetas mediante meteoritos mientras están congelados. En teoría, despertarían al colisionar contra otro planeta… y sería entonces cuando empezaríamos a invadir el cosmos.
Ejem, esta última parte es mi idea. A ver si logro convencer a los científicos para que la liemos un poco parda.