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Espada contra almas en pena

jonathan.riggall

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Hace un año nos llegó Bleach: The Blade of Fate, un juego de lucha 2D para la portátil de Nintendo. Ahora llega una secuela que sigue con el mismo sistema de juego pero que añade hasta 17 personajes nuevos. Más razones para los fans para estar enganchados a esta historia de samurais modernos.

Los anime de éxito siempre suelen tener adaptaciones en forma de videojuego. Bleach no es una excepción, y después del éxito de Bleach: The Blade of Fate, para DS, los chicos de Treasure se han puesto manos a la obra para crear su secuela, Bleach: Dark Souls. Lo cierto es que el juego no es nuevo, en Japón apareció hace casi dos años, pero ya se sabe que muchos juegos de anime llegan con considerable retraso a nuestras tierras, y este no es una excepción.

Historia original
La línea argumental de Bleach: Dark Souls ha sido creada especialmente para el juego, y tiene lugar entre las dos primeras temporadas del anime. Rukia ha desparecido de nuevo e Ichigo deberá ir en su busca y evitar que se cumplan los planes de los malvados Hollows, que se han infiltrado en la Sociedad de Almas.

El modo principal del juego es pues, el modo historia. En este modo se nos enseñará el uso de los controles gracias a tutoriales e incluirá combates de uno contra uno, dos contra dos y uno contra varios enemigos. Además de la pura pelea, habrá misiones en las que deberemos recolectar objetos, misiones de evasión del peligro y un pequeño juego de preguntas y respuestas. Gracias a nuestros progresos podremos conseguir objetos desbloqueables y dinero para comprar galerías o nuevos colores para los trajes de los personajes.

Un gran familia
Esta nueva entrega de Bleach cuenta con la aparición de más de 40 personajes seleccionables. A los ya conocidos de The Blade of Fate Ichigo Kurosaki, Rukia Kuchiki o Uryū Ishida, se añaden otros como Kisuke Urahara, Ururu Tsumugiya, Kūkaku Shiba o los malvados Hollows. Aún así no partimos con todos los personajes desde el principio, si no que deberemos desbloquearlos poco a poco.

Cada personaje tiene una gran variedad de habilidades estándar y ataques únicos. Pueden esquivar ataques, hacer dobles saltos, ataques aéreos… cada uno con su propio estilo. También pueden realizar combos y convertir ataques normales en superataques en determinados momentos. Algunos de estos ataques resultan muy complejos, pero gracias al tutorial los acabaremos aprendiendo para sacar de cada personaje su máxima potencia.

El sistema de cartas
Además de la lucha y las misiones, como ya existía en The Blade of Fate, podremos usar un sistema de cartas que activan diferentes habilidades nuevas. Si ya jugamos al anterior juego no nos costará controlarlo y si somos novatos en el tema, después de ver los tutoriales correspondientes, tampoco, pues es bastante sencillo.

Las cartas se activan con la pantalla táctil y abarcan todo tipo de poderes, desde mermar la defensa del enemigo a hacer que vaya más lento o forzarlo a tener una determinada postura. Las podremos ir desbloqueando en el modo historia así como comprarlas en la tienda.

El sistema está mejorado del primer juego resultando menos caótico y obligando al jugador a dejar margen de tiempo entre carta y carta que lanza –cosa que provocaba en el primero luchas en las que, si tenías muchas cartas acumuladas, apenas debías luchar-. Además, pasamos de poder seleccionar dos cartas a poder seleccionar cuatro.

Varias maneras de disfrutar el juego
Además del modo historia, no podía faltar un modo arcade clásico, de uno contra uno. A estos modos se les unen los modos VS, en los que podremos competir hasta con 4 jugadores a la vez, tanto con la conexión inalámbrica, con nuestros amigos, o con el wi-fi, compitiendo con gente de todo el país.

Con wi-fi podremos jugar de 3 maneras distintas. En una batalla libre, en un combate con amigos/rivales –en la que competiremos contra los amigos que tengamos añadidos al juego- y el combate por rangos, donde lucharemos contra jugadores con nuestro mismo rango y subiremos a medida que vayamos ganando combates.

Lo mejor de los modos VS es que nos permiten un alto grado de personalización. Si no nos gusta el sistema de cartas podemos eliminarlo. Si preferimos tener barra de vida ilimitada y que gane el que haga más daño en un determinado tiempo, también podremos configurarlo.

En este aspecto, el modo multijugador, Dark Souls tiene mejoras respecto a The Blade of Fate, sobre todo por el tema de la personalización y porque la conexión es más ágil.

Pero si somos patosos podemos empezar con un modo entrenamiento, en el que practicar tanto como queramos los ataques de cada personaje que vayamos desbloqueando.

Además de estos modos, una opción muy atractiva es la de construcción de nivel. Nos permitirá crear cartas personalizadas y asignarlas a cada personaje, con lo que cambiarán sus habilidades

Pocos cambios
El apartado gráfico del juego varía poco respecto a su anterior entrega. Como funcionó The Dark Souls, la desarrolladora Tresure no se ha arriesgado a hacer muchos cambios en ese aspecto y ambos juegos se parecen mucho estéticamente y en sistema de juego.
Aún así los personajes se ven más grandes, las animaciones tienen pequeñas mejoras, los zooms con la cámara 3D crean efectos cinemáticos muy vistosos y los ataques especiales lucen más que en The Dark Souls.

Los actores de doblaje del anime repiten aquí para dar vida a los personajes. Respecto a la banda sonora conserva todo el espíritu de la saga, y el tema principal, “Resistance”, está interpretado por una exitosa banda del país nipón, High and Mighty Color.

Una entrega un tanto tardona
Bleach: Dark Souls se ha hecho esperar, pero ya queda poco para que podamos jugar a él. Aunque esta segunda parte del juego para la DS no ofrece muchas novedades, su alta jugabilidad, la variedad de personajes y, en general, que adapta de manera correcta el anime, hacen que sea un título lo suficientemente llamativo para que tenga una buena acogida.

Si una formula funciona, ¿por qué cambiarla? Parece que esta premisa la tienen muy clara los chicos de Treasure, que han mejorado lo justo para ofrecer un nuevo reto a los fans, pero sin perder nada de lo que dio éxito al primer juego de Bleach para DS.

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