Un smartphone no es nada sin las aplicaciones. Aunque todo dispositivo Android viene instalado con unas cuantas de serie, el verdadero partido se saca cuando consultamos el bazar de Google y comenzamos a instalar otras nuevas. Sin embargo, el problema llega poco después con los updates, así que te contamos cómo evitar que las apps se actualicen automáticamente (y que no te suponga dolores de cabeza).
La tienda, la clave
En el primer párrafo hemos hablado de la tienda de Google como la piedra angular sobre la que gira todo lo relacionado con las aplicaciones, y en el caso de las actualizaciones automática esto también se cumple.
La Google Play Store es un completo centro de mando desde el que controlar muchos apartados muy diversos. Para este cometido en concreto, lo primero que hay que hacer es pulsar sobre los tres puntos que aparecen en la parte superior izquierda, mirar el desplegable que sale y cliquear sobre “Ajustes” (que se encuentra en la parte inferior, para ser exactos).
Una vez estés dentro, una de las primeras opciones que se vislumbra en pantalla lo deja bien claro: “Actualizar aplicaciones automáticamente”. Si pulsas sobre este campo, Google Play Store abre una ventana muy pequeñita en la parte central donde se te deja configurar las actualizaciones.
Lo aconsejable es que estipules “Sólo por Wi-Fi” o “No actualizar aplicaciones automáticamente” (que es el tema que tratamos en este artículo, para ser exactos). Eso sí, nunca selecciones “En cualquier red”, ya que te quedarás sin tarifa de datos en poco tiempo… Haz click en “Listo” cuando hayas terminado.
En caso de que sólo busques que alguna en particular no se actualice, busca la app en el bazar, haz click sobre los tres puntos que aparecen arriba a la derecha y desactiva “Actualizar automáticamente”. Fácil y rápido.
