Battlefield 3 me ha sorprendido mucho. Y lo curioso es que me ha sorprendido tanto en lo positivo y en negativo. Del multijugador ya esperaba un gran juego, puesto que la serie principal de Battlefield (no hablo de Bad Company) siempre ha tenido un modo multijugador increíble, pero tenía muchas ganas de ver la nueva campaña, sobre todo porque en los anuncios recordaba mucho a lo visto en su más directo competidor, Modern Warfare 3. Del multijugador ya hablaré, aunque ya adelanto que es impresionante, sin embargo el modo campaña me ha dejado con sensaciones encontradas debido a su irregular puesta en escena. Porque la campaña para un jugador de Battlefied 3 tiene momentos en los que te deja con la boca abierta, momentos en los que te desespera y momentos en los que directamente tienes ganas de cerrar este modo y ponerte a jugar al modo multijugador.
El argumento del modo campaña de Battlefield 3 no es el más original del mundo, pero tiene bastante lógica. Terrorismo, operaciones secretas, y en mitad de todo eso un marine llamado BlackBurn que tendrá que detener todo esto. Lo curioso de esta campaña es que tiene un desarrollo que recuerda inevitablemente a Modern Warfare. ¿Por qué? Básicamente porque en algunos niveles no llevaremos al personaje principal, sino más bien a otros personajes que tengan que ver en la operación, ya sea del bando estadounidense o de otros bandos del juego. Pero al contrario que Infinity Ward o Treyarch, DICE aprovecha estos momentos pada dos cosas: que aprendas a controlar algunos de los muchos vehículos de Battlefield 3 y mostrarte momentos absolutamente espectaculares del juego y sobre todo del motor gráfico. Claro, que al hacer esto también te preguntas, una vez que te has acabado la campaña, que tiene que ver el personaje en realidad con el protagonista del juego.
Y este es precisamente uno de los principales problemas de la campaña para un jugador de Battlefield 3. La serie Modern Warfare tiende a ofrecer situaciones increíbles que asombran al jugador, que son más show que reales, y aquí DICE quiere hacer lo mismo con su campaña pero sin dejar de lado el realismo que le caracteriza. Hay momentos espectaculares, no lo niego, pero también hay momentos en los que DICE se pierde en esa espectacularidad dejando niveles que son desesperantes debidos por culpa de los “scripts”.
Entre los primeros podemos citar algunos ejemplos increíbles. La escena en la que encarnas a la artillera dentro de un caza es directamente impresionante e increíble. La sensación de estar dentro del avión, de combatir contra los enemigos y de bombardear está muy conseguida. Una de los mejores niveles de guerra que he visto nunca y que supera con creces al ataque de los tanques que se pudo ver en la E3 pasada, aunque no es lo mismo verlao que jugarlo. Igualmente, algunos escenarios en los que combatimos contra el PLR -los terroristas- también son increíbles y muchas de estas batallas podrían ser mejores si no fuera por dos razones: la IA y las escenas preprogramadas o, como decía, scripts.
Y es que es imposible no fijarse en estos dos fallos. En primer lugar hablo de las escenas preprogramadas, porque hacía años que no se veía en un juego de estas características. Como si fuese Doom, veremos como los enemigos salen siempre del mismo sitio y si morimos y repetimos la escena, veremos como de nuevo salen del mismo sitio una y otra vez. Aunque lo peor es cuando ves la salida de un nivel, vas hacia allí y no es que no se produzca el final de nivel, es que directamente tienes una barrera invisible en mitad de la salida, porque resulta que no ha llegado el NPC que tenía que llegar a esta salida. No os digo el nivel, por no hacer un claro “spoiler” del argumento, pero sí que os desesperada
El segundo fallo es la IA en este modo campaña y hablo de la IA de forma general, tanto de nuestros compañeros como la de los enemigos. Y es que en este juego se supone que luchamos con marines bien entrenados y que nos ayudan en las operaciones contra enemigos, los cuales deberían disparar a todo blanco que ven. Pero resulta que no, en realidad los enemigos sólo te disparan a ti continuamente, mientras los compañeros disparan de vez en cuando a sabér hacia dónde, porque eres tú el único que matas enemigos. Puede que parezca que vas con tu batallón, pero en realidad estás tú solo contra los enemigos. Esto se ve especialmente en algunas de las misiones que sólo tenemos un compañero y en las que tendremos que acabar con todos los enemigos nosotros mientras te está diciendo continuamente que disparas a este o a aquel.
Sé que DICE y EA han dicho que esta campaña es un entrenamiento para el modo multijugador, y si se refieren a acostumbrarse a morir por estos fallos, lo han conseguido, aunque por otro lado también se tiene la oportunidad de saber cómo disparar cualquier tipo de arma y de manejar cualquier tipo de vehículo. Y es que no hay que equivocarse. Si hay algo realmente espectacular en este Battlefield 3, eso es el multijugador del título.
Y aquí sí que se ha echado el resto. Comenzando por BattleLog, un nuevo sistema integrado con los navegadores webs que sirve básicamente para seguir todo nuestro progreso en el juego online. Podrás ver cuáles son los siguientes logros a desbloquear, qué misiones se nos dan mejoras y con que otros jugadores hemos jugado.
A partir de aquí tenemos diferentes mapas y diferentes modos, aunque también es cierto que podemos jugar online cooperativo en algunas misiones o incluso misiones más cortas, que recuerdan de nuevo a Modern Warfare. Ambos tipos de multijugador se disfrutan mucho, pero nada comparado con el modo Conquista, es decir, con el modo clásico de Battlefied, que además ofrece a los jugadores una variante llamada “Large”, que se traduce literalmente como “enorme”, porque los mapas en estos casos son gigantescos.
Es aquí donde más se disfruta Battlefield, porque tendremos la oportunidad de manejar tanques, aviones y helicópteros en una batalla entre dos bandos que deben controlar diferentes objetivos. En este modo no sólo se mezcla la acción, sino también la buena elección de las diferentes clases (soldado, ingeniero, soporte, explorador) y el rango o nivel que tengan, puesto que dependiendo de ésto se habrá desbloqueado más objetos y armas de la clase, lo que es absolutamente necesario en ciertas batallas. Además, dependiendo de la clase hay extras interesantes para tus aliados, puesto que por ejemplo, el ingeniero puede reparar vehículos, que siempre es bueno.
Hablando de vehículos, muchos os preguntaréis si sigue siendo complicado manejar aviones y helicópteros (aunque por Internet se pueden ver vídeos de auténticos ases controlándolos). Los aviones no son tan complejos, aunque sí son rápidos, muy rápidos, con lo que hay que tener paciencia a la hora de acabar con los enemigos y realizar más una pasada. Lo que sigue siendo verdaderamente complicado es controlar un helicóptero, aunque en esta ocasión DICE ha escuchado a los jugadores y ha suavizado ligeramente su control. Además, si en PC prefieres usar un Pad, es infinitamente más fácil que con el ratón y el teclado.
Por supuesto, los vehículos de tierra como tanques, jeeps o tanquetas son fáciles de controlar y llevar un tanque siempre da un extra de protección, porque algo que tienes que tener claro con el multijugador de Battlefield es que vas a morir mucho, pero mucho en las primeras partidas. Eso sí, con práctica, todo es disfrutable puesto que multijugador de Battlefield 3 es realmente de 10.
Y nos queda el apartado técnico de Battlefield 3. He visto las versiones de Xbox 360, PS3 y PC con un ordenador medio (no he podido llegar a calidad ultra) y la verdad es que es un juego que te deja con la boca abierta. El motor gráfico Frostbite 2.0 de DICE es ASOMBROSO y hay que escribirlo así, con mayúsculas. Las escenas de primeros planos de los soldados son asombrosas, porque puedes ver que expresan sentimientos gracias al uso de una texturización soberbia. Las escenas de combate ya sean a pleno día, lloviendo o en la oscuridad, son increíbles gracias a un uso de los efectos de iluminación increíbles.
Pero a nivel gráfico me quedo con dos niveles que he descrito ya antes como de lo mejor del juego. Hablo del nivel aéreo y del nivel con los tanques. Hay que verlo para creerlo. Es tal su nivel detalle que parece de verdad. Nubes, misiles, o modelados de las aeronaves te dejan sin aliento, pero también lo hacen los pequeños detalles como los cascos de los pilotos, el cuadro de mandos de nuestro avión o las ralladuras de la cabina del piloto. Lo mismo puedo decir de la batalla de tanques a campo abierto. Asombroso.
Y por una vez no tengo que decir que el sonido está bien y acompaña adecuadamente. No se entendería a Battlefield 3 sin su magnífico diseño de sonido. Esto es una batalla y no hace falta que la música suene en todo momento, solo en los instantes dramáticos para el manido argumento. El resto del juego vamos a escuchar soldados gritando, balas pasando a nuestro lado y el perfectamente recreado sonido de nuestras armas. Explosiones, cristales rompiéndose o edificios derrumbándose tienen un sonido extremadamente realista. Y por supuesto, en un perfecto castellano en nuestro bando, porque el resto de soldados habla en su idioma original, algo que se agradece para dar más realismo al juego, aunque DICE ha dado más importancia al sonido ambiente y en ocasiones no se escucha lo que dicen y necesitas de los subtítulos para saber que comentan tus compañeros.
Battlefield 3 es un grandísimo juego pese a su campaña
Aunque yo he relatado sus fallos, aunque he visto que la campaña para un jugador no es tan buena como la pintaban, eso no significa que Battlefield 3 no sea un gran juego. Técnicamente desde luego es de lo mejor que he visto nunca, con un motor que te deja con la boca abierta en momentos puntuales del juego y en el resto simplemente te asombras, que no es algo que consigan muchos títulos. Es verdad que la campaña no es lo mejor del juego, pero cuando la campaña se termina queda el mejor multijugador de acción que he visto hasta ahora y que además va extremadamente fluido. El resultado es un título sobresaliente, con fallos que no hay que negar, pero que no ensombrecen para nada el resultado final de juego.
